Para el urbanistas poblano, integrante del Consejo Interdisciplinario de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, Francisco Vélez Pliego, los retos del nuevo presidente municipal de la ciudad de Puebla, José Antonio Gali Fayad, están, en primer lugar, en actualizar el conjunto de instrumentos de regulación del desarrollo urbano, que son condiciones necesarias para que las obras y el financiamiento existentes se ajusten a la normatividad establecida.

“Eso supone revisar con toda celeridad los instrumentos de planeación existentes, no hay que olvidar que la actual gestión federal pondrá énfasis en el desarrollo metropolitano”.

Ante esta perspectiva, recordó que en la actualidad existen 59 regiones metropolitanas en el país, por lo que concurren recursos económicos asociados al Fondo Metropolitano, pero aclaró que son recursos que se entregan con programas vigentes de desarrollo urbano: “Hay estudios realizados, pero los gobiernos no tienen obligación de cumplirlos”.

Por eso, desde la perspectiva de Vélez Pliego, resulta necesaria una debida instrumentación para acceder a los recursos del Fondo Metropolitano porque recordó que, por esa deficiencia, en la actualidad los apoyos se limitan a menos de 400 millones de pesos cuando antes se recibían hasta 3 mil millones de pesos en ese mismo rubro, pero eso se logrará si el presidente municipal electo convence al gobernador de Puebla de impulsar la predominancia de la ciudad de Puebla en esa zona metropolitana, “que tiene que ver con esa visión de resolver cosas”.

Otro gran reto que tiene el próximo gobierno municipal, afirmó Francisco Vélez Pliego, es poner orden en las obras que se llevan a cabo, “porque son un verdadero desastre”, lo que genera que los desencuentros entre las autoridades mantengan en incertidumbre a la sociedad poblana.

“Algunas obras son ocurrencias pero no programables para que tengan impacto urbano y, por lo tanto, hacen conflictiva la realidad de la ciudad; no son pocas las obras que se necesitan”.

Para el directivo e investigador, un tema fundamental es coordinar la visión de los gobernantes, que deben impulsar una misión compartida con los ciudadanos, porque hasta ahora lo que se observan son desencuentros, ya que se apuesta por el desarrollo inmobiliario, pero se olvidan del desarrollo de la vivienda y de la calidad de vida para los ciudadanos: “Hay zonas que solamente requieren mantenimiento y recursos básicos”.

Lo que recomendó el urbanista universitario es atender la capital del estado de Puebla de manera más equitativa, es decir, tener una visión de la ciudad que tome en cuenta a los sectores populares y ya no a los sectores privilegiados: “Es urgente ordenar la ciudad y no enfocarse solamente en los 6.9 kilómetros de la zona de monumentos, porque hay más espacios que atender”.

Vélez Pliego apuntó que la sociedad poblana merece que los intereses políticos sean sobrepasados y que se invierta en acciones que no resultan costosas, como el agua.

“En la zona metropolitana de la ciudad de Puebla se tiene que resolver el tema del agua, aprovechar de manera sustentable los mantos acuíferos, generar una mejor distribución y la conducción del agua potable”.