Luego de la advertencia del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS) sobre el riesgo de que la ciudad de Puebla pierda el reconocimiento de la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad, el urbanista de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) Francisco Vélez Pliego lamentó que las políticas seguidas por las autoridades poblanas no estén enfocadas en la preservación del patrimonio y solamente pretenden montar una escenografía para atraer el turismo.

Aunque reveló que las autoridades municipales y estatales no hacen caso a las recomendaciones de los expertos, el director del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades (ICSH) de la máxima casa de estudios de Puebla afirmó que actualmente no existe una relación entre los gobernantes y el consejo del patrimonio edificado en el centro histórico, “porque tienen opiniones contrarias a las que manejan los gobiernos”.

Ante eso, el experto en temas del desarrollo urbano lamentó que en la actualidad las autoridades gubernamentales de la entidad poblana omitan ejercer sus funciones de vigilancia en la zona de monumentos, lo que ocasiona que con el paso del tiempo las edificaciones históricas se pierdan y se ponga en riesgo el reconocimiento otorgado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Desde su perspectiva, existe en la actualidad un proceso de demolición constante en el centro histórico de la capital poblana, que afecta el desarrollo urbano de la zona, pero el problema al respecto es que las autoridades de gobierno no actúan en consecuencia: “Ponen los sellos cuando los edificios son demolidos, actúan demasiado tarde y por esa causa se han perdido inmuebles valiosos del siglo XVII principalmente; parece que nos les interesa el rescate y mantenimiento de la zona monumental”.

Vélez Pliego dijo que el gobierno poblano solamente piensa en acciones de embellecimiento ornamental que en nada resuelven el problema: “Es triste que piensen exclusivamente en la lógica del turismo, con lo que no resuelven la totalidad del problema, que involucra a la sociedad en general, se ha afectado el patrimonio edificado y no hay forma de defender al gobierno”.

Desde la perspectiva del investigador universitario, si continúa la pérdida de los monumentos históricos la UNESCO puede considerar quitar el reconocimiento que se tiene como Ciudad Patrimonio de la Humanidad, “pero quieren mantener la política agresiva de sustituir monumentos y conservar solamente las fachadas”.

 “De seguir así como están las políticas gubernamentales, más tarde que temprano nos echarán de la UNESCO, porque de unos años a la fecha hay una pérdida significativa de 100 inmuebles aproximadamente, incluidos en el decreto de 1977, y la cifra se incrementa de forma alarmante.”