Durante la primera mitad del sexenio de Rafael Moreno Valle, el desempleo aumentó y el gobierno no ha generado fuentes de trabajo, señalaron Marco Antonio Mazatle Rojas, líder de MAS, y Ricardo Jiménez Ávila, del Frente Amplio Social (FAS).

En rueda de prensa, denunciaron que ha existido en el estado una ausencia de políticas encaminadas a detonar el empleo, en una mirada crítica e inmediata puede percibirse la poca eficiencia de los resultados, además de realizar prácticas de infraestructura que no benefician el dinamismo económico.

“El estado ahora confiere esta obligación a los empresarios, siendo lo más ricos quienes se olvidan de ella contratando vía outsourching, y los inversionistas más pobres, quienes no pueden costearles al representarles un 30 por ciento en el gasto adicional a los sueldos que pagan a los trabajadores”, dijo Marco Mazatle.

Detallaron que tan sólo en julio de 2013 el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) ubicó a Puebla como el tercer estado más pobre del país, después de que se encontraron 261 mil 800 nuevos pobres.

De acuerdo con el organismo, en la entidad viven en carestía 3 millones 878 mil 100 personas, es decir, el 67 por ciento del total de los poblanos.

Hace uno días, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que el déficit de empleo en Puebla creció .6 por ciento. Frente a este panorama, 720 mil personas se encuentran en la economía informal, sin seguridad laboral, horarios establecidos o garantía de pago y más de 107 mil buscan trabajo sin encontrarlo; la mayoría jóvenes.
El desempleo no da marcha atrás. En el segundo trimestre del año, la tasa de desocupación fue de 4.2 por ciento, el mayor nivel de los últimos 11 meses.

Las estadísticas refieren que en julio de 2014 la cifra de población de 14 años y más en el país económicamente activa es inferior a la del año pasado. En 2013, la tasa fue de 60.01 por ciento y este año es de 59.19 por ciento.
En el periodo actual ha disminuido el número de trabajadores con acceso a la seguridad social, a pesar de que esta prestación es un garante constitucional de la carta magna mexicana. 

En Puebla a la informalidad se le ha atacado como un problema, cuando en realidad se trata de una solución ante las carencias de encontrar mejores oportunidades de desarrollo. 

La economía subterránea emplea a tres de cada 10 poblanos, sin constituirse como empresas, según la ENOE, que revela que la fuerza de trabajo que hay en la entidad es de 28.3 por ciento está en la informalidad.

Pese a esto, no se ve que esta estrategia económica cambie, las grandes inversiones en las obras de infraestructura e incluso carreteras sirven para interconectar las regiones y explotar su economía, aunque en la actualidad estas vías acercan regiones cuyo costo no puede ser pagado por quienes se verían mayormente beneficiados derivados de sus altas cuotas, beneficiando sólo a las grandes empresas que sí pueden costear incluso traslados más largos, esta es la incongruencia que mantiene al país en la desigualdad que le impide crecer.