Desde las primeras horas del lunes, como una especie de cadenita, comenzaron a circular en las redes sociales mensajes de inconformidad en contra del gobierno del estado de Puebla, mensajes donde incluso piden la expulsión del estado de todos los que componen en gabinete de "lo mejor está por venir", entre los que se encuentra el secretario de Seguridad Pública, Facundo Rosas Rosas, además del procurador general de Justicia Víctor, Antonio Carrancá Bourguet, a quienes reprueban por actos de abuso de autoridad, omisión, además de corrupción.
Al secretario de Seguridad Publica no le han perdonado, ni se lo van a perdonar, el caso del menor José Luis Tehuatle Tamayo, asesinado por elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP), en medio de un fallido operativo ordenado y dirigido por él mismo.
No le han perdonado el golpe a las filas de la Policía Estatal Preventiva para dar de baja a todos los policías que ya habían adquirido derechos por más de 20 años de trabajo y a quienes curiosamente los dieron de baja por "reprobar el examen de confianza", y a los que volvieron a contratar en forma administrativa lo hicieron sin reconocerles nada de su antigüedad.
No le han perdonado el incremento de los secuestros, asaltos en carretera, robo de vehículos, de bandas dedicadas al robo de hidrocarburos, de bandas de colombianos, italianos y anexas dedicados al robo en residencias, de los que se dedican a las extorsiones.
‎La comparecencia de este servidor público ante el Congreso del estado, para "justificar" su permanencia, fue sólo un teatro montado, porque en realidad las redes sociales solo piden que sea expulsado de Puebla.

 

Las cabezas de cochino


Al procurador Víctor Antonio Carrancá no le perdonan que se le haya ocurrido la puntada de utilizar una cabeza de marrano para compararla con la del menor José Luis Tehuatle, en el montaje de la "onda expansiva".
No es posible que en medio del dolor que embargaba a‎ la familia del menor asesinado por el aparato de gobierno, el procurador presentará la cabeza de un cerdo para sus "experimentos" con tal de hacer creer a los poblanos que una onda expansiva había provocado la muerte de un menor y no un proyectil de gas lacrimógeno disparado con toda la mala leche contra la población.
No le han perdonado la burla de reunir a todos los medios de comunicación de Puebla y parte de los nacionales para hacer oficial la protección a un puñado de asesinos, y después utilizar esa misma institución —la Procuraduría General de Justicia— para perseguir a los pobladores de San Bernardino, en una, de nuevo, escena montada para "dar cumplimiento a una recomendación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos”.
‎Las redes sociales son quienes al final van a poner a cada funcionario en su lugar.

 

En Atlixco, las madrinas son primero


En la entrega pasada le comenté de la gravedad de que en las filas de la Policía Ministerial, de la Comandancia de Atlixco, estuvieran operando como si fuera comandante o agente del Ministerio Público Carla Ivone García García, con pleno conocimiento del comandante a cargo, Ángel Medel.
Le comenté que en las filas de la comandancia de la Policía Ministerial del Estado (PME), a cargo de Ángel Medel, se ha enquistado una mujer que no trabaja ni en la PGJ ni en la Ministerial, y que se hace pasar como comandante o Agente del Ministerio Público, como bien le convenga.
Se trata de Carla Ivone Garcia García, alguna vez con el cargo de secretaria en la Policía Ministerial del Estado, y dada de baja por alguna circunstancia desconocida.
Esta mujer tiene el acceso para ingresa a la Comandancia o a la Delegación del Ministerio Público, de acudir a los levantamientos de cadáver o investigaciones de homicidios.
Por separado —ella sola— se entrevista con familiares de agraviados donde no sólo obtiene información, sino que además es la "encargada" de pedirles para la "gasolina".
Se trata de una persona fuera de las instituciones de justicia que se abastece de información.
‎¿Para quién?
Y ahora le comento que esta mujer estaría vendiendo información confidencial de investigaciones, que van a generar muchos problemas en ese distrito.
Nos vemos cuando nos veamos.