Raúl Montoya, de 56 años de edad, un trabajador administrativo del Colegio de Bachilleres fue una víctima más de los más de 12 mil burócratas despedidos por el morenovallismo.
La estrategia fue la misma: presionar al trabajador hasta obligarlo a renunciar. Y así sucedió en el caso de Montoya.
El director jurídico del Colegio de Bachilleres le anunció el cambio de adscripción y una reducción salarial.
El auxiliar administrativo tendría que dejar Puebla donde siempre trabajo para irse a Tlacopetec y ganando menos. 
El trabajador apeló a su antigüedad para no cambiarlo de lugar de trabajo y tampoco reducirle el salario. La respuesta fue negativa.
Y peor aún se le amenazó que si no se presentaba a trabajar a Tlacopetec tendría que renunciar a su puesto o sería dado de baja.
El funcionario apeló asuntos familiares para no irse a trabajar a otro municipio, la respuesta fue la misma. En respuesta Raúl Montoya anunció que prefería suicidarse a irse a trabajar a otro lugar.
Nadie le hizo caso. Ayer, se presentó a las instalaciones centrales del Colegio de Bachilleres para tratar de resolver su caso y ante la cerrazón del gobierno morenovallista, se trasladó al área de fotocopiado para quitarse la vida con una pistola que llevaba.
Los directivos del Colegio de Bachilleres al enterarse del suicidio ordenaron el desalojo de los trabajadores y dieron aviso a sus familiares. 
Al llegar la hermana del occiso espetó: “ustedes mataron a mi hermano, ustedes lo orillaron a esto”.
Reflexión a parte es la seguridad que existe en las instalaciones del Colegio de Bachilleres.
¿Cómo es posible que una persona armada ingrese a las oficinas con un arma?
¿Por qué los policías auxiliares contratados para garantizar la seguridad de los que ahí trabajan no aplican los protocolos de revisión?
Este caso puso pasar a mayores si el occiso trata de desahogarse disparándole al director o a los que ahí se encuentra.
Afortunadamente esto sucedió, pero el hecho es una muestra del acoso laboral que padecen miles de trabajadores al servicio del gobierno del estado.


Una denuncia desde Zacatlán

A la redacción de Intolerancia Diario llegó la siguiente denuncia.
En el Centro Escolar Presidente Juan N. Méndez de Zacatlán padres de familia y maestros descubrieron un fraude en  la preparatoria matutina
Los responsables: el director de la preparatoria, Profesor Avendaño y la  maestra Luz Elena, persona intelectual de este robo a los estudiantes.
2. Estas personas se dedicaban a cobrar de más en todos los servicios que se tienen que hacer en la dirección como los admisión, certificados exámenes extraordinario.
Estas personas manejan el dinero ilícito para hacerpréstamos y cobrar intereses, así como hacer viajes a Las Vegas una o dos veces al año.
3. La sociedad de padres de familia descubrió todo esto y se les regreso parte del dinero desolo este año, pero verdaderamente es necesario auditar desde el 2009.
4. A todo esto, hay un encubridor y quien es director del centro escolar, esta personafue puesta por el mismo #goberbala y es el que maneja y amenaza al mismo  personal que labora si no están de su lado.
Incluso, frenó un reportaje de la televisora local que denunció el caso, adjudicando y señalando que ya estaba solucionado el caso y que se removería al director de la preparatoria, sin embargo, aún hay padres muy molestos por estos actos, parecidos al CENCH de Puebla.
Todos los maestros están en desacuerdo, pero no se atreven a sacarlo a la luz pública.

Hasta aquí la denuncia de un grupo de maestros y padres de familia que están en contra de estas anomalías.