Los mencionamos en orden de su reciente triunfo de Antequera, provincia de donde Alejandro Talavante, José Antonio Morante de la Puebla y Rodolfo Rodríguez “El Pana” han dado la nota alta al torear vestidos a la usanza goyesca la corrida de esa comunidad.

Éste es un gran triunfo, más en materia presencial pues el llamado “Brujo de Apizaco” encaja perfectamente en estos cuadros de mucha plasticidad, seguramente le abrirá a Rodolfo Rodríguez más y más puertas para paseíllos en aquellos rumbos, donde ya lo conocen y desde días previo a las corridas en los que aparece acartelado, a la gente le gusta cachondear, enparroquiarse con él junto a una botella o porrón de oscuro vino.

Publicamos esta nota junto con las bellas fotos que la ilustran, para hacer a alusión a lo recientemente afirmado: “Lo bello y hermoso de la fiesta, es que aún quedan algunos románticos”. Ojalá y de verdad sirva de algo, a algunos en cuanto a inspiración de clase, mucho tipo y sobre todo personalidad.

Mientras, en Huamantla, ha concluido su feria 2015 con la corrida de toros post “Huamantlada”, evento callejero que parece, éste año haber tocado fondo, en cuanto lo que realmente es: un desmadre callejero, el alcohol, el desorden; toros que se han escapado de los circuitos ya muy mal delimitados y con “trancas” que ya no atrancan nada, multitudes desordenadas y alcoholizadas por las calles, el predominio absoluto del naquerío vuelto un desmadre. Algo debe hacerse o una verdadera tragedia es inevitable.

Bien, en la plaza la entrada ha sido bastante buena sin llegar al lleno absoluto, otro síntoma importante de lo que está pasando en esa, antes prestigiada feria.

En lo taurino, de lo ocurrido en “La Taurina”, José Luis Angelino, quien de tanto torear y hacerlo bien, se ha venido aferrando con seriedad a una línea de triunfo tras triunfo; ha cerrado de manera triunfal cortando 2 orejas 2  a su segundo el cuarto de la tarde “Profeta” de nombre, cárdeno claro. Número 71 de la ganadería “D´Haro” que volvió a esa plaza tras años de ausencia; éste toro fue premiado con los honores del“Arrastre lento”.

Y, rematamos este post, con la frase que le da título: ¿De casualidad, han visto ustedes un toro de lidia extraviado?

Ya al término de la corrida, ultima de feria y después de casi 24 horas de jolgorio e ingesta continua de alcohol de quienes empiezan a festejar la noche previa, hoy llamada de “Burladeros” en la que al colocar las trancas y burladeros los parroquianos que chambean en eso, beben, bailan y se sangolotean  hasta que el sol sale;luego participan de la “Huamantlada”, después a la plaza, a la corrida.

Y, ocurrió que ya de salida, al final de todo, cuando ya nos íbamos yendo encontramos de pronto al responsable del traslado de los toros antes de la “Huamantlada” y de la corrida, de embarcarlos después, en el caso de los que se corren en las calles.

Se le veía cansado, además de preocupado, pero, con verdadera cara de angustia, nos comentó: ¡”Me faltan cuatro toros”!, el precio de lo que vale su carne, más el encargo, la responsabilidad, bien que justificaban su preocupación.

Pero, ya después, haciendo cuentas con calma, llegamos a la siguiente conclusión matemática: en realidad, nunca fueron 4 toros 4, los que se saltaron las trancas o salieron de vigas y rejas que conforman los circuitos donde los sueltan; uno de ellos, saltó, lo atraparon y volvieron a su carril, volvió a saltar luego. Ya van dos.

Otro más que se huyó por las calles hasta un parque vecino, donde fue acribillado, y como en la canción de los perritos:¡Ya llevamos, quedan tres…tres!El otro, “cuarto” se fue rumbo a los sembrados, llegando de seguro a algún terreno, donde, los vecinos a cuyas tierras llegó, una vez atado, amarrado o sujeto, lo primero que hicieron fue llamar al carnicero del barrio…y entonces; ¡Ya no nos falta nada, nada y de sus carnes, no quedó…nada…nada!

¡Buen Provecho vecinos!

 

Llegando en calesa, los dos elegantemente vestidos a lo goyesco: ambos con habano puro en boca, ¡“sin anillo en el puro”…!

 

Un Paseíllo muy, muy sui-generis, de hermosos trajes a lo Goya: Morante, Talavante y Rodríguez.

 

José Luis Angelino con dos orejas en mano, salió triunfador de la tercera y última de Feria Huamantla 2015.