Lo sucedido ayer en el Senado de la República, en donde el poblano Luis Miguel Barbosa presentó una iniciativa con proyecto de decreto para reformar los artículos 35 y 116 de la Constitución Política en materia de candidaturas independientes, que terminó convertida en un discurso duro y contundente en contra de Rafael Moreno Valle y de su gobierno, dejó en claro que el senador perredista va en serio sus cuestionamientos en contra de quien fuera su aliado político desde hace cinco años.
Sabedor de que después de formular sus argumentos que reforzarían su iniciativa recibiría en la sede del Senado la visita de Moreno Valle, el tehuacanero se lanzó duro y sin tapujos en contra de los candados legislativos ordenados desde Casa Puebla, para cerrarles el paso a los candidatos independientes.
Esta vez, no hubo indirectas.
Barbosa lanzó flechas directas hacia la ley anti Bronco ordenada por Moreno Valle, lo cual se suma a las recientes declaraciones del senador poblano, cuando se pronunció en contra de una alianza PAN-PRD.
Y aunque algunos se resisten a creer en la veracidad de la ruptura, me parece que el discurso habla por sí solo.
Estos son algunas frases de las expresadas en tribuna por Luis Miguel Barbosa: 

La existencia de candidaturas independientes o de políticos sin partido es un avance, constituyen un poderoso llamado de atención a las fuerzas partidarias en materia de democracia interna y en las reformas que deben realizar para eliminar las prácticas que los alejan de la población.
En las candidaturas independientes la ciudadanía encontró una nueva esperanza para que el gobernante se acerque a las causas populares, las candidaturas independientes sacudieron y atemorizaron a sectores de la clase política, poniendo de manifestó que esta nueva figura es un elemento a considerar en los comicios de 2016, 2017 y 2018.
El Grupo Parlamentario del PRD en este Senado toma distancia, repito, toma distancia de aquellos que consideran a la política como un espacio de élite cerrado sólo a los partidos y a sus miembros, acusamos un intento desde las entidades federativas para echar atrás a esta conquista ciudadana, un intento de cerrar este nuevo espacio de participación y expresión cancelando la figura de las candidaturas independientes.
Consideramos que en las candidaturas independientes se han tornado en una alternativa de participación electoral necesaria irrevocable en la conquista de una ciudadanía urgida de opciones diversas más allá de las ofrecidas por los partidos políticos.
Las candidaturas independientes no pueden ser obstaculizadas ni secuestradas por grupos de poder representadas en gobiernos emanados de uno u otro partido, no se salva ninguno.
Un candidato independiente debe surgir de la ciudadanía como expresión natural y necesaria de un contexto social, político, regional y cultural, especial y específico; para ello es requisito indispensable que las leyes faciliten estos procesos, cualquier obstrucción atenta contra esa expresión de la democracia contemporánea.
Posterior al proceso electoral de este año 2015, en los Congresos Locales de diversos estados, al regular esta figura, dichas entidades federativas me refiero a sus congresos establecieron en sus constituciones y legislaciones electorales cargas y restricciones desproporcionadas en comparación con el contenido de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales.
Especialmente ilustrativo resulta el caso de Puebla, donde se llegó al extremo de no sólo subir el porcentaje de apoyo ciudadano necesario a tres por ciento del padrón electoral, no de la lista nominal, del padrón electoral, sino además de someter al ciudadano al irracional y absurdo requisito de a personarse ante la autoridad electoral para que como parte del trámite se llene un formato y se pueda emitir un apoyo.
128 mil firmas aproximadas, 128 mil formatos llenos, 128 mil ciudadanas y ciudadanos poblanos formados en diversos locales de la autoridad electoral para suscribir un apoyo para una candidatura independiente, ¡imagínense lo desproporcionado de ese requisito!
Lo anterior representa una regresión en el espíritu democratizador de la reforma político electoral, promulgada en febrero de 2014, mediante la manipulación de las leyes locales.
Los congresos estatales, en esos estados han minado las posibilidades de que un ciudadano pueda participar a través de la figura de candidatura independiente lo cual es una regresión a la participación de la ciudadanía, al derecho de los ciudadanos de elegir una mejor opción electoral.
La política encuentra su razón de ser en el ciudadano, quien es el verdadero protagonista de la democracia; por tanto, no es legítimo que quienes detentan el poder impulsen mecanismos para aferrarse a él.
La ciudadanía demanda espacios reales de incidencia en los destinos públicos, más allá de que los hombres del poder, se los digo a ellos, a los hombres del poder, los candidatos independientes llegaron para quedarse, quedarse en nuestro sistema político y debemos, los hombres de partido, nosotros, acostumbrarnos a convivir con esa figura.

Tras esta larga, pero elocuente cita, me queda claro que Barbosa decidió ridiculizar a Moreno Valle, a quién recibió en la misma sede del Senado, minutos después de haber exhibido su condición de enemigo de la democracia.
El colmo para el gobernador poblano fue aparecer en una foto, en donde mostró una total sumisión ante quien lo destrozó en la tribuna senatorial.
Bien dicen que el que a hierro mata, a hierro muere.
Ver para creer.