Ahora que el gobernador puso el grito en el cielo por las declaraciones de la titular de Sedatu, Rosario Robles y del subsecretario de Desarrollo Urbano Juan Carlos Lastiri, respecto a que el desarrollo regional de Audi también incluye al estado de Tlaxcala, diciendo que el tema Audi es única y exclusivamente para Puebla, me parece que vale la pena hacerle algunas precisiones.
En primer término, desde que el gobierno peñista decidió respaldar con recursos federales el proyecto de Audi fue con el fin de detonar la región sur sureste, que por razones geográficas abarcan también a Tlaxcala.
Desde la Sedatu y Sedesol, aún en tiempos de Jorge Carlos Ramírez Marín y Rosario Robles respectivamente, se promovió el apoyo a este clúster automotriz con fondos federales, los cuales también fueron concursados por estados del norte, entre ellos Coahuila, Aguascalientes, San Luis Potosí, Guanajuato, Sonora y Baja California.
En aquel entonces, fue Juan Carlos Lastiri, como subsecretario de Desarrollo Social, quien se encargó del enlace entre el secretario de Ramírez Marín y el subsecretario Alejandro Nieto con el gobierno del estado, para encaminar esos recursos a Puebla.
No es casualidad que desde Sedatu se haya realizado la evaluación y aprobación de la Ciudad Modelo de Audi y de la proyección de la región que incluye a Tlaxcala, particularmente a Huamantla, por ser el municipio con mejor infraestructura de la región.
En pocas palabras, el hecho de incluir al vecino estado de Tlaxcala, por parte de Rosario Robles, no es más que un asunto de incluir al mayor número de municipios —sin importar el estado—, en un proyecto al que le han inyectado millonarios recursos, incluida la autopista Audi, la clínica del IMSS, la escuela de capacitación de la UAP entre otras obras.
En su egocentricidad, el gobernador poblano olvidó que sus ambiciones futuras incluyen también a los 31 estados de la República, los cuales esperarían una visión mucho más amplia de un hombre que en sus sueños guajiros, se ve gobernando todo México.

Pablito, un promotor de Tlaxcala

Por si fuera poco, al Señor de los Cerros ignora que si alguien ha promovido a las empresas de la industria automotriz y a desarrolladores de vivienda, es nada más y nada menos que el diputado Pablo Rodríguez Regordosa, quien opera y despacha frecuentemente en ese municipio vecino, particularmente en la Hacienda de Soltepec, que se ha convertido en el centro de reunión entre alemanes y funcionarios de Puebla y Tlaxcala, encabezados por el exsecretario de Desarrollo Económico morenovallista, quien en todo caso, sería el gran traidor de Puebla.
Digamos que al gobernador lo traicionaron hasta sus chalanes.

Tlaxcala le comió el mandado a RMV

Por cierto, quien ha levantado las cifras en materia económica y de impulso a la industria, es el gobernador de Tlaxcala, Mariano González. El criticado mandatario vecino ha logrado rebasar los números de Moreno Valle en Puebla.
Por increíble que parezca, uno de los estados más pequeños del país, con grados de marginación extrema, hoy es menos pobre que Puebla de acuerdo a los indicadores nacionales y ha visto crecer su industria de manera sustancial comparada con el estado gobernador por Moreno Valle.
Y después de todo lo anterior, todavía se atreve el morador de la Casa Puebla a cuestionar, ¿por qué incluyeron a Tlaxcala?
Que alguien le diga que estos macro proyectos no son personales, sino de interés nacional. Lo que nos debe enojar a nosotros como poblanos, es que el diminuto estado de Tlaxcala, esté generando mejores condiciones a las empresas, provocando que prefieran muchas de ellas Tlaxcala, antes que Puebla.
Eso sí calienta.