Sin saberlo, el 4 de julio de 2010, los poblanos no solo votaron para quitarle las llaves de Casa Puebla al marinismo y al PRI, sino que también lo hicieron para dar paso a la creación del reinado de Rafael Moreno Valle.
Desde su arribo a la casona de Los Fuertes, el gobernador olvidó que era un mandato el que le confirieron los poblanos y asumió un reino en toda la extensión de la palabra.
Fue así como decidió nombrar —en vez de gabinete, una corte real—, con base en sus más fieles amigos.
En la lista de personajes ajenos a Puebla, que decidieron venir a “hacer las Américas”, están personajes como Cabalán Macari, Luis Maldonado, Juan Pablo Piña, Roberto Moya, Jorge Benito Cruz, Roberto Flores Toledano, Víctor Carrancá y por supuesto el “flamante” alcalde Luis Banck.
Sobra decir que el arribo de estos ilustres personajes fue justo el día de la fastuosa ceremonia de coronación de Rafael I, quien fue nombrando uno a uno como los nuevos nobles de su naciente reino.
Y es que fiel a los tiempos del absolutismo, el Señor de los Cerros decidió otorgarle un pedazo de su reino a su fiel escudero Luis Banck, ordenando esta donación al su Congreso, para beneficio de su amigo.
Justo así lo hacían los reyes en el período absolutista, en donde se donaban extensiones de tierra, con todos los beneficios que estas representaban, como el tributo de la plebe en favor de los propietarios de la misma.
Así es como ahora, los capitalinos seremos gobernados por el amigo del Señor de los Cerros, sin que nada ni nadie pueda impedir que esta regia decisión se cumpla a cabalidad.
Sin duda, lo que podría tomarse como una mofa del gobierno morenovallista, es un retrato de lo que se vive día con día en nuestro estado y en donde —el viernes pasado—, fuimos testigos de otra muestra de soberbia de parte del Señor de los Cerros.
Luis Banck y los daños colaterales
Aunque el gobernador pensó que el hecho de utilizar al Congreso del Estado para nombrar a Luis Banck como alcalde sustituto, tras la renuncia de Tony Gali y la decisión del alcalde suplente Gerardo Maldonado de no protestar el cargo, sería visto como un asunto de simple pragmatismo político, la realidad es que el impacto en las redes sociales resultó mucho más grave de lo calculado.
Basta con hacer una simple suma, para saber que Luis Banck podría ser alcalde de Puebla por 8 meses más que Gali que fue constitucionalmente electo.
Y es en donde los memes publicados cobran mayor fuerza y validez.
Y efectivamente, las elecciones de 2013 que provocaron un derroche multimillonario por ambos partidos y candidatos en la capital, sirvieron para que el ganador ocupara el cargo por dos años, mientras que en una sentada, 34 diputados aprobaran la imposición de un amigo más del gobernador.
Y fue así como los levantadedos morenovallistas, “eligieron” en cinco segundos, a quien gobernará la ciudad por los próximos 32 meses.
Sin duda, estamos ante un hecho que indigna a muchos poblanos y sobre todo, que va a generar nuevos daños políticos a un gobernador que está convencido que el 4 de julio de 2010 quedó facultado para hacer todo lo que se le pegue la gana.
Ni más, ni menos.