1.- Denomino así a toda y cada una de las varonas, que de alguna forma están involucradas con la Ibero. En este caso la de Puebla.

2.- Hacen una rueda de prensa informando que saldrán a la calle, al mismo tiempo que otros miles de diversos colectivos mexicanos protestando por las agresiones de que son víctimas las mujeres.

3.- Todas sus exigencias son justas, necesarias, obligadas en sociedades atrasadas como la de Puebla, enclavada en un país atrasado, en un subcontinente también atrasado como hispanoamérica es.

4.- Ignoro si las ahora luchadoras sociales se hayan informado de todo el atraso femenino existente en una machista sociedad. Tampoco si la elevaron a rango de comunicación. Mucho menos si establecieron la ruta de politización con ideologización para alcanzar la concientización requerida para transformar de ahora para siempre, hasta que sean abuelas, el mundo de hoy.

5.- Concientizadas, tienen la obligación social como jesuitas, de ser líderes. Los líderes conducen para el beneficio de sus pueblos. Ahí donde el jesuitismo ha llegado desde hace siglos crea una nueva organicidad superior, para irla acomodando a trazos de Historias Patrias. La organización que necesitamos en México es la necesaria para elevarnos sobre el nivel de la bestialidad imperante.

7.- ¿El cómo? los colectivos de otras geografías lo resolverán, es cosa de autonomías.

8.- Aquí necesitamos crear un organismo que indique, a las dependencias de los 3 tipos de gobierno: federal, estatal y los de los 217 ayuntamientos ¿qué hacer?, para lograr la igualdad entre géneros, no de géneros, previo diagnóstico situacional: “El lugar de la mujer en Puebla 2016”.

NUESTRA CIUDAD

¿A dónde se guarecen los sacerdotes viejos? ¿Cómo encuentro a Paz y Fuentes? Galardonado hace tiempo en Florencia. Avísenme, no la chinguen, es mi cuate. Gracias de antemano.