Contrabando, piratería, drogas, equipos clonados de sonido y de video, caracterizan la mayoría de los negocios que se encuentran establecidos en el mercado “Jorge Murad”, también conocido como La Fayuca.

Estos negocios han significado la caja chica de corporaciones de policía como la Ministerial del Estado, la PGR delegación Puebla, además de Comercio Exterior, la Fiscalía General del Estado y otras más.

Isidro López Rosas “La Coneja”, es uno de los líderes principales de estos grupos que pagan protección para seguir operando con impunidad a plena luz del día.

“La Coneja”, de acuerdo con notas periodísticas y versiones de locatarios, es el líder de 50 por ciento de los comerciantes, que tomó a la fuerza las instalaciones principales, apoyado por pandilleros del barrio de San Antonio y otras zonas consideradas violentas.

Su hijo o entenado, Eligio Cerón (a) “El Negro”, es el tesorero del grupo de “La Coneja”, sin embargo este mismo grupo de comerciantes lo ha desconocido por carecer de local en este mercado, una de las principales condiciones para ocupar un cargo administrativo.

De las dos entregas pasadas donde le comenté que este mercado es actualmente uno de los corredores de Puebla donde se distribuyen todo tipos de droga y que tienen como otro punto importante los barrios de La Luz, El Alto, La Acocota, Analco, además de la colonia Azcarate, donde operan narcotienditas.

De las redes del narcomenudeo

“Quienes encabezaran el cuantioso negocio del narcomenudeo son Eligio Cerón, con antecedentes penales por delitos de lesiones, despojo y otros, además del padre de este, Isidro López Rosas, quien ya estuvo detenido por delitos de narcomenudeo.

Eligio Cerón tiene una hermana de nombre Mari, quien también se dedica al narcomenudeo a través de un negocio de tortas, además de que operan con otros más que venden en los pasillos, en las entradas y salidas del ‘Jorge Murad’.

Mari, la hermana de Eligio, hijos de “La Coneja”, es la esposa de Martín, uno de los jefes del narcomenudeo que opera en el barrio de Analco y que están agrupados con otra red de narcomenudistas identificados como los de “La Mafia”.

La organización de narcomenudistas de “La Mafia” se ha extendido, junto con la banda de Martín, a los barrios de La Luz, El Alto, La Acocota, además de que ya llegaron al Centro Escolar Niños Héroes de Chapultepec, amén de diversos puntos del primer cuadro de la ciudad, incluyendo los antros que se ubican en el Centro de Convenciones.

Este grupo de narcomenudistas cuenta, para los pagos de protección, para los arreglos con mandos policiacos, principalmente de la Agencia Estatal de Investigación (AEI), con el exagente del Ministerio Público y excomandante de la desaparecida Policía Judicial del Estado, Manuel Román Aguilar Álvarez, “El Pipucho” y del hijo de este, Carlos Aguilar Martínez.

Estos “protectores” cuentan con grupos de choque y de guardaespaldas que estarían conformado por agentes en activo de la Policía Ministerial del Estado (PME), además de exagentes de la misma corporación que fueron dados de baja por haber reprobado los exámenes de confianza”.

Y todo esto ocurre en medio de autoridades federales, que tienen la principal responsabilidad del combate al narcotráfico.

Nos vemos cuando nos veamos.