La cita fue a las 12:15 horas de la tarde, en Casa Aguayo; la Secretaría de Gobierno, de Seguridad Pública y la Fiscalía General del Estado (FGE), darían cuenta del operativo "Encrucijada", adelantado por la muerte violenta de tres agentes de la Fiscalía Investigadora de Delitos de Alto Impacto (FISDAI).

La invitación a la conferencia incluía a la FISDAI, además del titular de la Agencia Especial de Investigación (AEI), pero este último, Luis Galán, no se presentó.

Para ingresar a Casa Aguayo los reporteros tuvieron que identificarse con su credencial e incluso dejarla a cambio de un pase que decía "visitante".

Pasado el primer control, tuvieron que esperar a que la sala destinada para la conferencia fuera habilitada por el personal de seguridad.

Quienes vieron a los agentes con trajes que ocultaban su arma de cargo, además del chícharo en una oreja, debieron haber pensado que el gobierno de Puebla se estaba preparando para cuidar a sus funcionarios de un posible atentado.

¿De periodistas?

Tuvo que pasar más de una hora para que los elementos de seguridad se cercioraran de que  los altos mandos estaban "seguros".

Al frente de la conferencia quedaron los 4 funcionarios más importantes de la seguridad de los poblanos, luego del séquito de guaruras que rodearon las instalaciones.

Los agentes no despegaban la mirada a los reporteros, los recorrían de pies a cabeza, seguramente alguno, además de su libreta, grabadora, cámara, celular, llevaba también alguna Uzi, un Cuerno de Chivo o un arma automática; por eso era necesario no descuidarlos un solo momento.

Hubo otros agentes que afinaron sus oídos para escuchar cualquier comentario que sirviera para elaborar un informe.

Fuera del inmueble que ocupa Casa Aguayo, aguardaban algunos familiares de los 87 detenidos como saldo del operativo.

Algunos aseguraron que el operativo se pasó por el arco del triunfo el Nuevo Sistema Penal Acusatorio.

Que se metieron a las casas sin orden alguna, que jalaron parejo, a todos los que se encontraban.

Imagine lector, las razias de los años 80, cuando en Puebla operaban los Servicios Especiales de Investigación (SEI) que fueron desarticulados por anticonstitucionales.

Casi a la par, el gobierno de Puebla sostenía una comida de acercamiento con medios informativos.

Fue en ese lugar donde el gobernador anunció un total respeto a la prensa.

Nos vemos cuando nos veamos.

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