Bailadora de flamenco desde los 12 años de edad, María Aliaga busca casa, en Puebla. Aliaga es una profesional del tablao, arte que abrazó desde niña, cuando a través de la fundación Cristina Heeren tomó su primer curso de flamenco en Sevilla, España. 

Información divulgada por el sitio Cuna de Grillos, indica que nació un 15 de septiembre hace 29 años. “Es hija de un torero de novillos y cuando tenía 5 años comenzó a bailar flamenco en la academia de Araceli Galván-Duque al poniente de la Ciudad de México”, dice el sitio especializado en el mundo de la política y la socialité.

La mujer que ha tenido presentaciones de flamenco en Stuttgart y Nueva York con la Adonays Flamenco Company comenzó el miércoles de la semana pasada a buscar un sitio para vivir junto con su marido en alguno de los fraccionamientos más exclusivos de la zona metropolitana de Puebla.

Las corredoras de bienes inmuebles tenían al menos en los últimos días un conjunto de opciones en Las Fuentes, La Vista y, como una segunda opción, Lomas de Angelópolis. El reto era encontrar una casa adecuada que incluyera una vivienda alterna para el personal de seguridad, siempre dispuesto.      

No es para menos, pues María Aliaga se casó con el secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer el 5 de diciembre de 2014, cuando el funcionario era aún Jefe de la Oficina de la Presidencia de la República. Ella tenía 26 años y él 36. 

De acuerdo con la fuente, aunque ha mantenido un bajo perfil desde que su esposo llegó a la titularidad de la SEP no ha perdido la concentración de sus actividades. “A pesar de que el hombre con quien se casó (…) pertenece al denominado círculo del presidente de México, Enrique Peña Nieto”.

El 19 de julio la columna Parabólica llevó como título “Viene Nuño”, que levantó la cejas entre los priistas más empeñados en ser candidatos al gobierno del estado en 2018. “Nuño no sabe ni en dónde está Puebla”, ironizó uno de ellos luego de conocer la parte central de esa columna, disponible desde hace 50 días.

En el staff del funcionario que ahora acompaña a Peña Nieto en la gira por China, “tienen como plan A la candidatura presidencial y como plan B la candidatura al gobierno del estado de Puebla, aunque haya nacido en la Ciudad de México”, se dijo entonces en el texto aquel.

Esa versión había sido contada al reportero por una fuente que regularmente tiene acceso a información en los primeros círculos de poder en la Ciudad de México. “Lo que en un principio pareció una idea lejana, casi inasible por la remota posibilidad ante el evidente desapego a la poblanidad, ha cambiado”.

Es en ese contexto que hay que entender los cientos de miles de correos enviados desde la oficina del titular de la SEP a padres de familia en el territorio estatal en esos días, para ofrecer información particular sobre el calendario escolar del periodo lectivo apenas comenzado.

Las señales que se perciben en torno a la figura de Nuño Mayer puede ser un conjunto de coincidencias inconexas, pero casuísticas que apuntan a una probabilidad en la antesala de los procesos de selección de los candidatos de las diversas fuerzas políticas. Nada está escrito como todo en política.

Muchas son las preguntas para las cuales pronto deberemos tener respuestas, pero dos inmediatas: ¿Si en una de esas hay una primera dama experta en arte y tablao? O ¿Si alguna familia poblana tendrá en breve como vecinos a los Nuño-Aliaga?