Dese la tarde del sábado miembros de corporaciones de policía en Puebla han sostenido reuniones amistosas donde son sondeados para saber por qué partido político van a votar.

Tal y como ocurrió en las elecciones para gobernador, donde contendió Rafael Moreno Valle, a los policías les están llegando nuevas propuestas para apoyarlos en caso de que su candidato gane. 

Se están ofreciendo mejores salarios, ayuda para la educación de sus hijos, para sus casas de interés social, además de bonos en efectivo y en despensas para la ayuda de su familia. 

Le comento al lector que en aquellas reuniones que le comento muchos policías se lo creyeron y dieron el voto, para ser correspondidos una vez que ganaron, con cambios que los dejaron asombrados e indignados.

Primero, les trajeron jefes de otros estados, a quienes no les importaron todas las necesidades de la policía ni de las promesas que les habían hecho.

Segundo, se valieron de los exámenes de confianza para, como pretexto, expulsar a policías con más de 20 años de trabajo y no pagarles sus liquidaciones como corresponde por ley.

En lugar de casas y de apoyos en su economía y su educación, les cargaron la mano sometiéndolos a turnos de más de 24 horas, además de que los destacaron.

No les permitieron el crecimiento laboral, los cargos y buenos salarios se quedaron en policías traídos de otros estados. 

En otras palabras y durante 6 años los sometieron en el ostracismo. 

Al término de esa administración y al inicio de la que está vigente las cosas fueron cambiando en las corporaciones de policía, poco a poco fueron regresando algunos beneficios y lo más importante, se terminaron las cadenas de despidos, sobre todo los que esperan un buen retiro y jubilación.

Pero a fin de cuentas ya están de nuevo hablándoles al oído y las promesas siguen siendo las mismas. 

Sólo falta saber si aprendieron algo.

Nos vemos cuando nos veamos