Las crónicas taurinas desde tiempo atrás siempre han dicho que al final, las orejas  cortadas solo son o vienen siendo pedaceria de toro. Cierto, esto es aceptado.

El arte y la emoción la dan los lances pintureros y alegres. Ocurren a veces o hacen los toreros cosas más importantes y trascendentes que lo que se premia con una oreja.

Tal ocurrió con Cayetano Rivera en la vigésima quinta de los “sanfermines”. De todas las plumas de escribidores surgió la misma frase: “Cayetano ha mostrado unas personalísimas maneras de hacer las cosas y ha sacado la raza del recordado “Paquirri”. Dos cosas que la mayor parte de los toreros no tienen o no pregonan”.

Gracias a Cayetano por decir lo que a tantos aficionados nos gusta: “más respeto y menos entrevistas”. Esto en relación, y ya lo comentamos por escrito una vez, pues lo protagonizó aquí en “La México”,  en cuanto a los impertinentes entrevistadores de callejón que les ponen el micrófono frente a la cara sin previo consentimiento.

Han sido muchos aficionados y cronistas que estuvieton de acuerdo en que el galleo por “chicuelinas” para llevar el toro al caballo, fue de lo mejor de la tarde. Pura pinturería sevillana andando y mandando en el ruedo. La faena fue una celebración de liturgia taurina, dominio de terrenos, tiempo y variedad.

Nos encontramos de frente al regreso de la leyenda: Ordoñez-Cayetano. “Hay tardes tan importantes que no importa la vida”. Tal ha declarado el torero, casado con la famosa y guaperrima  presentadora de la TVE Eva González con quien acaba de tener un bebé Cayetano también de nombre, de 3 meses de edad.

Mientras en Apizaco, en esa enorme plaza se dio otra alternativa con paupérrima entrada; al padrino, que ya no está para estos arreos, poco faltó para que en su segundo le sonarán los tres avisos y el actuante de testigo en su segundo toro sí escuchó los 3 trompetazos 3. Al de la alternativa, un aviso, también en su segundo y se fue de vacío sin peludas en las manos. Una verdadera ridiculez. Debe ya terminarse con estas pantomimas.

Una corrida absurda en territorio taurino tlaxcalteca, con toros de ganaderías del norte y de los estados de Nuevo León y de Hidalgo, cabe preguntar ¿Porqué el desaire a las ganaderías del estado, de casa?, para una supuesta alternativa de un matante capitalino que en su vida había toreado en Tlaxcala con un padrino originario de Tijuana, Baja California con un resultado muy, muy lejos de lo artístico. 

FOTOS:

FOTO 1. Todo el poder de Cayetano Rivera en “Las Ventas” ante un toro de “Cortés”.

FOTO 2.- El galleo por “chicuelinas” para llevar el toro al caballo, lo mejor de la tarde.

FOTO 3.- Un pase de “trincherilla”, conmovedora expresión de arte.

FOTO 4.- Tristeza y pena: una alternativa con los tendidos blanqueando de cemento y lamentablemente vacíos. 

FOTO 5. – Como ya es costumbre en Tlaxcala: mejor entrada en el callejón que en los tendidos.