Una vez más, el Instituto Estatal Electoral resultó el gran perdedor. Tal como aconteció en el ejercicio por la gubernatura, el IEE dejó más dudas que certezas como árbitro electoral.

Como se recordará, el IEE determinó organizar el debate a la alcaldía de Puebla, tras el mandato de los magistrados de la Sala Regional de la Ciudad de México del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Según el Consejo General del IEE, los candidatos y candidatas no se pusieron de acuerdo para la realización del debate en una primera instancia y esto derivó en que el Consejo Municipal del IEE refiriera que al no haber condiciones no se efectuaría el encuentro entre ellos, por lo que algunos agraviados recurrieron al TEPJF para poder ejercer este derecho, marcado en el Código de Instituciones y Procesos Electorales del Estado de Puebla (Coipep).

Tras este mandato, al IEE no le quedó otra opción más que realizar el debate a marchas forzadas, donde la desorganización imperó.

Y como no podía ser de otra manera, el IEE replicó el formato anacrónico y retrógrado que se utilizó en el debate por la gubernatura.

Ya en el ejercicio democrático, el candidato tricolor Guillermo Deloya Cobián demostró ser el más preparado para manejar los temas que le aquejan a la ciudad, sin embargo, la marca priista lo condena.

El panista Eduardo Rivera derrochó oficio político, esquivó los ataques de sus adversarios, principalmente, de la candidata de Morena.

Claudia Rivera Vivanco, la aspirante de la coalición “Juntos Haremos Historia” sólo alcanzó refugiarse en el discurso de López Obrador para hacer sus propuestas de gobierno.

La abanderara del Verde Ecologista, Paola Migoya Velázquez, una vez más mostró sus dotes de exhibicionista. Víctor Gerardo Gabriel Chedraui del PSI fue el más carismático, pero su pasado priista también lo condena. Gonzalo Juárez Méndez, por Compromiso por Puebla sólo cumplió.

De esta forma, el debate por la alcaldía, a un día de que cierren las campañas electorales, simplemente fue ocioso. Muy poca o nula utilidad dejará este ejercicio, las cartas están echadas y ya muy poco se moverá para este domingo.

Veremos y diremos.