¿A quién se le debe de agradecer cuatro horas de bloqueo de la autopista México-Puebla?

A Javier Solís, un capo huachicolero que se dice dueño de la plaza de Santa Ana Xalmimilulco y presunto responsable de las recientes ejecuciones en esa región.

A Ángel “El Pelón Villegas, presunto jefe de plaza de San Martín Texmelucan, detenido el pasado 16 de mayo, por personal de la Procuraduría General de la República, como supuesto responsable de liderar una banda dedicada al robo de hidrocarburos y quien pudo haber sido liberado semanas después. 

Cualquiera de estos dos personajes fue relacionado con un enfrentamiento entre elementos del Ejército Mexicano y después en un bloqueo, donde se registraron daños cuantiosos.

Tras los hechos de violencia del sábado, donde no se registraron heridos de gravedad, pese a que se detonaron armas de fuego de grueso calibre y se presentó el incendio de al menos dos tráileres, los medios de comunicación manejaron los rumores que se corrieron y que apuntan a dos personajes del crimen organizado.

Uno de Santa Ana Xalmimilulco, donde la violencia se ha desatado en los últimos días, a tal grado que han aparecido cuerpos sin vida de hombres y mujeres ejecutados con disparos de arma de fuego, y otras acciones de violencia.

De hecho, en estos mismos rumores existe el que este Javier Solís y dos de sus hermanos ya se encuentran detenidos. 

En breve se darán estos detalles.

El caso de Ángel Villegas, quien se encontraría ya en libertad, tras haber sido acusado de múltiples delitos, también se dice que fueron sus cercanos quienes se enfrentaron con personal del Ejército Mexicano, tras haber sido descubiertos en posesión de hidrocarburos robados.

La Fiscalía General del Estado (FGE), en las próximas horas dará a conocer el desenlace en las investigaciones.

Delegada, ¿abusada o abusiva? 

Doña Carla Morales Aguilar, delegada del Instituto Nacional de Migración, decidió ponerse medallas falsas para poder impresionar a sus jefes y salvarse de sufrir una sanción e, incluso, un despido fulminante ante el pésimo trabajo que realizó estando al frente de una Delegación Federal.

Y al mero estilo de “las viejas policías” se dispuso a allanar domicilios, pensiones, negocios, para detener a principalmente mujeres a quienes acusan de permanecer ilegalmente en el país.

El secreto de esta servidora pública es armar documentos de detención falsos para llevarlos a sus jefes y presumir que están realizando su trabajo, cuando es todo lo contrario, se la ha pasado en negociar con gente que no está de manera legal en México, en este caso, en Puebla. 

Y le comento lo anterior porque en forma reciente la delegada ordenó que se hicieran varios allanamientos para detener a mujeres que según estarían de ilegales.

El número de detenidas fue de 16 y déjeme decirle al lector que a todas las tuvo que liberar porque todas tenían su documentación en orden.

Lo malo es que los abusos de esta mujer no van a terminar, hasta que pase el riesgo de que pueda perder su trabajo.

Nos vemos cuando nos veamos.