Me pregunto: Qué hubiese sido de Cholula si en lugar de haberlo convertido en un área de tugurios, antros y de drogadicción, hubiesen respetado sus  alrededores enriquecidos por cientos de templos religiosos, pirámides que narran nuestro pasado, universidades y pueblos típicos, mágicos de a de veras, de historia y cultura.

Hoy Cholula es un caos, un mazacote de corrupción y falta de dignidad y de respeto a propios y extraños. Obviamente la ley es letra muerta. Las tierras de cultivo y sus alrededores las convirtieron en torres de concreto, “multiviviendas” de lujo y no tan lujo, que no cuentan con la vialidad indispensable para transitar, y el agua ya no alcanza para nadie.

Las tierras de cultivo van desapareciendo junto con el agua y la tranquilidad del lugar, en su lugar hoy los robos y hasta los asesinatos están al orden del día y las pequeñas tiendas y changarros han desaparecido, incluso varios lugares de comida casera han sido borrados del mapa cholulteca, quizá por alguna maniobra oscura.

Cholula podría haber sido un lugar único en México, si hubiesen fomentado la creación de bibliotecas, cafés, teatros, restaurantes de diversas especialidades, más escuelas y universidades, salas de arte y exposiciones, en fin, si hubiesen hecho de Cholula un centro cultural en lugar de convertirlo en un centro de corrupción, propiedad de unos cuantos malos gobernantes.

Margarito tenía un discreto “changarro de papas fritas en “El Camino Real”, pero tronó, cuando pusieron la ciclovía que, sirven para dos cosas…