Luego de las elecciones del pasado 1 de julio, en el saldo de la hecatombe que sufrieron todos los partidos políticos, aún hay quienes empiezan a moverse a tratar de rescatar lo que queda.
Sobre todo en el Partido Revolucionario Institucional (PRI), donde varios han empezado a levantar la mano para dirigir los despojos del tricolor poblano.
Juan Manuel Vega Rayet, encabeza la lista, seguido de Alberto Jiménez Merino y ahora se dice que hasta Juan Carlos Lastiri Quirós, quiere revivir.
Pero también el grupo de Enrique Doger Guerrero, encabezado por Javier Casique, quiere mantener el control, a pesar de la estrepitosa caída en la elección.
Y es que afirman que quieren mantener ese coto de poder para poder hacer negociaciones, las que tienen el objetivo de regresar por sus fueros a la Universidad Autónoma de Puebla (UAP).
Todo porque el PRI, podría ser una verdadera moneda de cambio en la próxima administración, sobre todo en el Congreso del estado, donde pueden ser quienes inclinen la balanza en la guerra que se avecina entre morenistas vs morenovallistas.
Por eso mismo, la disputa que ha empezado por el PRI poblano.
La herencia
Mientras tanto, la presidenta electa de la capital de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, está en espera y viendo como le deja Luis Banck la ciudad, en medio de inseguridad y ambulantes.
Todo porque pareciera que es el Año de Hidalgo para el Ayuntamiento.
Últimamente se han dedicado a dar permisos como Larines a los ambulantes, quienes tienen sitiado las calles del centro histórico, desde la altura de la 4 Poniente y 5 de Mayo.
Este sitio es el más visible; sin embargo, distintos puntos de la ciudad el problema es el mismo.
Solo hay que darse una vuelta por las colonias populares como Amalucan, La Margarita, Agua Santa, así como en la zona de la Central Camionera de Puebla (Capu) y hasta por Plaza Dorada, para darse cuenta de la situación.
Incluso el jardín del Carmen en el primer cuadro de la ciudad constantemente está siendo utilizado por ambulantes de comida, gracias a las constantes concesiones.
Ahora el Ayuntamiento de Puebla otorgará 700 permisos a vendedores ambulantes para las Fiestas Patrias
Lo malo es que nadie los cuenta y dicen que al menos llega el doble, como ocurrió en la pasada Feria del Carmen.
Por eso mismo, está la cacería no solo contra los vendedores de gelatinas, sino contra todo lo que se mueva sin que haya dado su respectivo moche.
Al menos eso es lo que cuentan los mismos ambulantes, que no hay piedad contra nadie.
Pronto sabremos cuántos recursos han entrado a las arcas municipales correspondientes a los permisos otorgados.
Tiempo al tiempo.
