Ahora que está de moda la Cuarta Transformación yo me pregunto como para cuándo llegará a Puebla y me lo cuestiono porque hay muchas cosas que en esta legislatura, la LX, son idénticas a las que se vivieron en las dos anteriores, la LVIII y LIX. Me explicaré.

Los diputados de las legislaturas LVIII y LIX se caracterizaron porque no recibían las iniciativas, no presentaban ninguna a menos que se les indicara o cuando presentaban alguna reforma, éstas ya venían planchadas; es decir, todo estaba apalabrado y había poco que cabildear.

Uno esperaría que esa máquina, que no daba espacios a la oposición ni escuchaba más voces que las autorizadas se hubiera retirado con la llegada de todos los diputados del bloque de Juntos Haremos Historia y la llamada Cuarta Transformación, pero después de mes y medio de que asumieron el cargo los nuevos legisladores, las cosas en el Congreso de Puebla no han cambiado.

Si acaso, la única diferencia en la forma de legislar de hace unos años, unos meses y ahora es quién envía los documentos listos, ya sólo para que se firmen, y ese alguien es José Juan Espinosa.   

Durante la sesión ordinaria de este lunes el diputado Oswaldo Jiménez López exhibió al legislador del PT que quiere que todo pase por sus manos, en caso contrario, bloquea las reformas.

Los ejemplos ya comienzan a ser notorios, como el tema del exhorto para solicitar la Alerta de Violencia de Género, que a pesar de que se trató de una iniciativa que promovió una diputada de su propia coalición, simplemente la ignoró e impuso su documento.

El panista demostró que el documento que les fue entregado a los diputados no era un dictamen para citar a los consejeros electorales y magistrados; sino un documento, que sobrepasaba las facultades del Legislativo, pero además no iba firmado por los integrantes de la Comisión Especial para Analizar el Proceso Electoral, sino por José Juan Espinosa. Esto se tiene documentado.

Lo que aprobaron en la sesión de este lunes es una aberración, sostuvo el panista. Y reveló que otras personas que firmaron el documento fueron los integrantes de la Mesa Directiva, que no tienen facultades para presentar los acuerdos, ya que esto corresponde a la Junta de Gobierno y Coordinación Política que preside Gabriel Biestro.

Los diputados recibieron en su correo un documento que dice a “Acuerdo que presenta el pleno…”, sólo que se les olvidó que antes de que lo presente el pleno, hay que votarlo.

Otra cuestión irregular es que el proceso electoral no ha terminado y el Congreso del Estado no es la instancia legal para la rendición de cuentas de los órganos electorales, en el caso de los consejeros es el Instituto Nacional Electoral al ser un órgano ciudadanizado y los magistrados por el Senado.

Ahora queda evidenciada la pugna entre José Juan Espinosa y Gabriel Biestro, ambos representantes de la coalición Juntos Haremos Historia, por el control del Congreso, donde lo que menos importan son las formas.