Sea cual sea, un exceso siempre termina por ser dañino. El caso de la mayoría que ejerce la coalición “Juntos Hacemos Historia” no es la excepción y por desgracia los poblanos somos quienes pagamos los platos rotos.

Aunado a la aplanadora que ya tienen en el Congreso del Estado y que hacen valer en cada Comisión o Sesión, los diputados de Morena han olvidado las formas, incluso la máxima: “Lo cortés no quita lo valiente”.

Es cierto que cuentan o contaron con el respaldo popular para llegar a la tribuna y defender los derechos de los poblanos pero no deben olvidar que ni siquiera con el altísimo número de votos que contaron se les dio un cheque en blanco.

El Poder Legislativo debe caracterizarse por ser un espacio de debates, donde los argumentos de una y otra postura sean la prioridad. Un terreno donde antes que las ofensas, gritos o descalificaciones; la razón, la civilidad y la tolerancia se impongan.

Por desgracia pareciera que los legisladores que llegaron por la ola lopezobradorista no están dispuestos a escuchar su contraparte ni siquiera para taparle el ojo al macho, ¿Cuánto les costaría a los morenistas ceder unos minutos de la sesión para que los diputados de la oposición (PAN y PRI) expongan sus puntos de vista?

A final de cuentas, en las votaciones de las Comisiones y del Pleno, pueden ganar sin problema y aprobar o rechazar cualquier iniciativa que no requiera una mayoría calificada; pero en su intolerancia no están dispuestos a abrir espacios críticos ni siquiera en la tribuna.

El espectáculo que se vive cada día en el edificio de la 5 Poniente lejos de ayudar al crecimiento y desarrollo del Estado está comenzando a crear una polarización entre la sociedad y de paso una pausa (que puede llegar al retroceso) en temas legislativos.

Que los morenistas quieran imponer sus leyes o tomar revancha y derogar las imposiciones de Rafael Moreno Valle, es grave y comienza a parecer una enfermedad altamente contagiosa.

Un detalle más que llamó mi atención en la sesión de este miércoles, fue la improvisada unión que se dio entre los diputados del llamado Frente (encabezado por Acción Nacional) y los del PRI, ¿Será está la forma en la cual la oposición podrá realmente frenar los excesos de la aplanadora de Morena?

49 años, cientos de historias

Anoche, rodeado de sus amigos, empresarios, colaboradores, representantes de medios de comunicación y parte importante de la clase política; Enrique Montero Ponce, celebró 49 años del Grupo Tribuna, siendo la radio su principal escaparate.

En la mesa principal del convite lo mismo se encontró a la presidenta municipal de Puebla, Claudia Rivera que al representante del gobernador Tony Gali, Ignacio Alvízar; quienes compartieron espacio con los directivos de Tribuna Comunicaciones y Don Enrique.

Entre los compañeros de medios, observé a Javier López Díaz, Carlos Martín Huerta, Juan Carlos Valerio y Arturo González, aunque sin duda, y sin intención, olvido algún otro nombre.

Desde este espacio, al igual que cada que tengo la oportunidad, le reitero mis felicitaciones a Don Enrique por el esfuerzo diario que ya le ha permitido ser poseedor de dos records Guinness por el número de transmisiones ininterrumpidas.  

Como ustedes saben amigos lectores, una gran parte de mi carrera como narrador de toros, fue precisamente cobijada por su espacio en la radio.