Música clásica, flores amarillas y nutridos aplausos recibieron la urna con las cenizas del escritor colombiano Gabriel García Márquez, en el vestíbulo principal del Palacio de Bellas Artes, donde se realiza un sentido homenaje al autor de “Cien años de soledad”.

El acceso al vestíbulo del recinto se abrió y enseguida autoridades del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y la familia del laureado autor aparecieron para descender sobre una alfombra roja y colocar al centro, sobre un pedestal de poco más de un metro de altura, la urna con las cenizas del escritor.

En el centro son depositadas flores amarillas, mayormente rosas, que eran las preferidas de quien también es un icono del llamado “Boom” de la literatura latinoamericana.

María Cristina García Cepeda, directora del INBA; Rafael Tovar y de Teresa, titular del Conaculta; Mercedes Barcha, esposa, y Gabriel y Rodrigo, hijos de Gabo, fueron los primeros en montar guardia de honor.

Enseguida vinieron los sobrinos y nietos del colombiano, quienes hicieron lo propio, rodeados de arreglos florales de instituciones como el Fondo de Cultura Económica, la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM, INBA y Conaculta.

Una fotografía monumental con el rostro del autor de “El coronel no tiene quien le escriba”, con una frase alusiva a la vida, atestiguó la tercera guardia de honor encabezada por el hermano de García Márquez, Jaime, y de inmediato apareció la cuarta en la que se hicieron presentes sus asistentes y personal que labora en su casa.

Alrededor de 300 personas, entre amigos e invitados especiales participan de esta parte del homenaje, a quien es considerado el “Padre del realismo mágico”.

Al evento se dan cita personalidades como los escritores Héctor Aguilar Camín, Ángeles Mastretta, Raúl Renal y Jorge F Hernández, así como el periodista Jacobo Zabludowsky, el político Porfirio Muñoz Ledo y el comediante Sergio Corona.

Notimex / Agencia Xinhua