Una teibolera que se dice extranjera, pero en realidad es mexicana confiesa el negocio que las tiene atrapadas en la oscuridad  de la noche y luces de neón.

“La mayoría ni sabe, si eres extranjera te dan de sueldo como entre 700 y 1000 diarios, si eres mexicana ganas como entre 250 y 600 pesos bailas tres veces de a fuerza, y te exigen ser puntual en tu entrada normalmente a las 5 y sales como a las 3 de la mañana“

“Además del sueldo ganas por copa que te inviten como entre 70 y 120 por cada una dependiendo el lugar y te dan entre 150 y 300 pesos por table es decir baile de cerquita con el cliente“

“El sueldo en algunos lugares depende de cuantas copas te tomes si no cumples con el tabulador es decir si te piden 10 por lo menos y no las haces te pagan la mitad de tu sueldo, si llegas tarde pasa lo mismo“.

“Por privado es decir un table de tres  canciones en lo oscurito te pagan entre 500 y 1000 pesos y si haces salidas vas a tener sexo llegamos a cobrar entre 2 mil 500 y 5 mil pesos depende del como se dejen”.

Brenda otra joven de apenas 25 años, ya es toda una veterana en su mundo de seducción, alcohol y drogas.

Ella a cambio de una michelada de 70 pesos, cambia caricias con sus clientes, 25 pesos son su  comisión de esa cerveza con limón y sal, una vez terminada, si no hay otra invitación, se levanta y se va.

La verdadera  ganancia es cuando logra convencer al para un “table privado“, ya que al cobrar 300 pesos, ella se lleva 150.

El dinero no le sobra, pero tampoco le hace falta. Entre sus planes tiene  comprarse una casa y un buen carro.

En una buena noche llega a ganar hasta cinco mil pesos, confiesa que le gusta comprarse cosas caras, después de todo para eso soporta todas las noches a hombres embrutecidos por el alcohol que la tratan sin el menor respeto.

“He llegado a trabajar en muchos lados, desde una casa de citas en Guadalajara, que era un lugar exclusivo para hombres de negocios, quienes incluso me llegaron a invitarla a Puerto Vallarta varias veces. Me  hospedaban en hoteles de lujo y comía en los mejores restaurantes, además de cobrar“, ríe.
“Si tú ahorita me llevas de viaje por tres días te cobro cinco mil pesos y obviamente pagas hotel y comida“.

Brenda  ocultó su doble vida a la familia varios anos pero una noche un amigo de su padre la descubrió en el table, lo que generó una gran  pelea familiar, en la que su padre optó por correrla.

“La moral pudo más que el cariño“, dijo con tristeza. Hay muchas historias parecidas a la mía“.

“A mi no me avergüenza mi trabajo, aunque si me preocupa que mis hijos se enteren, a lo mejor no podría soportarlo, por eso pido a los clientes que nunca llamen en domingo, ese día lo disfruta con mis hijitos”.

Brenda  gana mucho dinero, pero dice sentirse sola, “después de todo soy una de tantas que bailamos desnudas en cárceles de oro“.

“No solo los poblanos, sino la sociedad mexicana  se caracteriza por su doble moral, hablar de sexo en familia provoca rubor y la mayoría de las veces dureza para juzgar a las mujeres que vendemos solo fantasías“.

A pesar de su corta edad, lanza un mensaje a sus compañeras: “Muchas nos dedicamos al despilfarro de la lana, compramos carros nuevos, ropa de marca, pero solo  pensamos en el momento. Hay que acordarse de que el tiempo pasa y no perdona, cuando ya no juntaste tu lana y la pobreza vuelve.
 
Estudiante de día, vampira de noche

“Esmeralda”, es como se hace llamar una joven de escasos 21 años de edad, quien labora como teibolera en conocido el un antro ubicado a unas calles de Teléfonos de México sobre la 25 Poniente.

A este lugar acuden desde ejecutivos, hasta obreros o estudiantes de dinero, quienes al calor de las copas se deleitan con los bailes sensuales al ritmo de canciones de grupos de los ochenta y en algunos casos hasta de Ricardo Arjona.

Cada noche entre semana, esta joven llega a ganar hasta mil 500 pesos, dinero que según asegura, lo invierte en sus estudios en la Universidad de las Américas. En fines de semana, esa cantidad se triplica.

—¿Llegas a prostituirte?

—No, nada más bailo y acompaño a los clientes a tomarnos unas copas, pero sí hay quienes llegan a tener relaciones por más dinero.

“Me metí en esta vida para salir adelante, como la gran mayoría. Somos madres solteras que tenemos que mantener a nuestros hijos. No quiero estar en este ambiente mucho tiempo. La verdad se gana muy bien, por lo que decidí trabajar y estudiar, además de mantener a mi hija.

“Somos varias las que estudiamos y trabajamos en esto. Aunque la gran mayoría sólo se dedica a bailar, existen quienes se prostituyen, ya que se gana mucho dinero.”

—¿Te da tiempo de estudiar y desvelarte?

—La verdad llega uno tardísimo, casi al amanecer de estos lugares. Así que tenemos que dormir toda la mañana, después de “curárnosla” tengo que ir corriendo a mis clases que inician desde las dos de la tarde.

—¿Entonces llegas borracha?

—En algunas ocasiones tenemos que tomar mucho con los clientes, aunque la mayoría de las veces tenemos un convenio con los meseros y barmans para que no nos sirvan tanto alcohol.

—¿Drogas?

—Sí, sí las hay y muchas chavas las utilizan. Yo no, a menos que tenga un examen grueso que presentar y tenga que estar muy despierta. Te aseguro que cuando termine mi carrera, dejaré esta vida.

“Es muy fatigosa, acabas muerta, pero por la lana vale la pena. No ganaría igual en ningún trabajo, creo que ni siquiera ganaré así cuando termine mi carrera•.

—¿Entonces no es seguro que dejes esta vida?

—Ahorita digo que sí, porque aún me faltan tres años de mi carrera, pero ya se verá cuando llegue el momento de graduarme.

“La verdad no es nada bueno encontrarte de pronto a compañeros en estos lugares, ya que la vida se te complica, pero todo se tiene que superar. Todo sea por mi hija, apenas tiene un año”.

Cada uno de los atuendos, las luces, la música, el escenario y el tubo, todo tiene una razón, algo psicológico para atraer a los clientes. Todo forma parte de una seducción psicológica, señaló Juan  Manuel Ramos, diseñador de interiores de tables dance en la ciudad de México.

Todas llevan un vestuario diferente pero al mismo tiempo similar en lo provocativo e invitando al deseo, desde un vestido de vaquera hasta con un baby doll.
Todas con brasier y tanga o short, zapatillas trasparentes con tacón de aguja y plataforma, medias de red o lisas pero hasta medio muslo, algunas con pelucas, otras con sombrero, etcétera.

En cuanto a los colores que utilizan, son generalmente colores brillosos de tonalidades diversas como rosa, rojo, azul, blanco, dorado y negro.
Respecto a la coreografía que bailan las mujeres, son extremadamente sensuales y provocativas, sin embargo, todas tienen un mismo ritmo el cual es muy marcado.

El maquillaje también juega un papel importante ya que por medio de éste se pretende resaltar las características de un rostro o bien disminuir los defectos que se puedan tener.

No es un tipo de maquillaje que se usa diariamente sino que éste suele ser más exagerado y es de tipo escénico.

Las bailarinas se desplazan de un lugar a otro a lo largo de la pista con movimientos muy sensuales al ritmo de la música.

La belleza se destaca por medio de la pose elegida, misma que debe captar la atención del observador desde el primer instante, haciéndola deseable al verla no tangible entre sus manos.

Otro elemento en las bailarinas es  la mirada, misma que tiene que ser un elemento clave de la belleza y respaldo de la pose, pues dependiendo de la forma en que la mirada sea controlada, se lograra crear distintas emociones, tales como afecto o rechazo, de la misma forma en que pueden inspirar sensualidad.

Por tanto, la mirada debe utilizarse acorde a los movimientos; por ejemplo, la pose puede ser idónea para captar la atención del espectador, pero si la mirada es baja o alta o demasiado fría, no se lograra la seducción.

Las luces son un elemento muy importante para dar una ambientación adecuada a estos shows ya que resaltan los movimientos de las bailarinas así como su vestuario.

Se utilizan para crear un ambiente cálido - como si estuvieran los clientes en la playa  o lugares de descanso- para motivar y mantener los ánimos candentes.

Asimismo se pretende influir en ellos a través de las luces de colores neón que generalmente suelen ser rosas, azules, rojas, blancas y también se llegan a utilizar los tonos ocres.

Los colores juegan un papel muy importante en la psicología de las personas y los colores antes mencionados por lo regular están vinculados con la pasión, la diversión, el juego, la mujer y la fiesta.

Las luces van acompañando los movimientos y a la música que utilizan las bailarinas en cada uno de sus shows, es decir mueven las luces de tal manera que van siguiendo las diferentes coreografías, ya que si la música es más fuerte o más "sensual" las luces toman matices más oscuros enfocándose a la gama de los rojos o si la música es más rápida las luces son más claras y parpadeantes.
 
El boom

Con el “boom” de los tables dances, también llegó la mujer desinhibida, quien arribó a trabajar en estos lugares.

Gracias a lo bien que se gana, y con el pretexto de que se es “artista” y no prostituta, creció el número de colegialas que se pagan sus estudios mediante estas labores eróticas.

A pesar de que ninguna institución gubernamental ni ciudadana ha hecho un estudio serio sobre el fenómeno en Puebla, el mismo ha crecido mucho y los lugares conocidos oficialmente como “cabaretes” —o en el giro rojo como “tables”—, se encuentran por toda la ciudad.

No solamente ahora las mujeres se prostituyen, también existe un fenómeno de prostitución masculina de universitarios con mujeres de edad madura, situación que se incrementa en Puebla.
 
Vivir del table
 
 
Numeritos

Sueldo 1000 diarios
Comisión por copa 50%
Tables privados 300 pesos
Comisión 50%
Salidas hasta $5000