Las descalificaciones del senador Javier Lozano Alarcón, en contra del presidente del PAN, Gustavo Madero Muñoz, abona a una fractura entre la militancia del blanquiazul porque se manifiesta una fuerte división que tendrá repercusiones negativas en las elecciones del 7 de junio, aseguró el analista político, Paulino Arellanes Jiménez.
El proceso sancionador que el comité ejecutivo nacional del PAN inició en contra del senador morenovallista, Javier Lozano Alarcón pega directamente al proyecto político del mandatario poblano, pero lo peor para ellos, agregó, es que manifiesta una fuerte división al interior del blanquiazul que se observa difícil de reconciliar antes de que arranquen las campañas.
Si le suspenden derechos partidistas a Lozano Alarcón, dijo el catedrático universitario, se debilitará al mandatario poblano, porque todos saben que el legislador es uno de los alfiles de Moreno Valle rumbo a la presidencia de la república.
Y es que esa disputa, aseguró el investigador de la UAP, repercute en las elecciones que ya arrancaron y afectará particularmente en Puebla, porque a partir del cuarto informe de gobierno, las percepciones están muy divididas en la población y en los militantes panistas.
El ataque lanzado por Javier Lozano Alarcón en contra de su presidente nacional, Gustavo Madero, tenía “línea” del gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, aseguró el politólogo de la facultad de Derecho.
De ahí que el politólogo deduce que el panismo poblano, se encuentra al día de hoy, confrontado con su presidencia nacional.
“Queda claro que el grupo poblano del PAN, tiene como cabeza al gobernador del Estado y no al líder panista nacional, eso permite ver con claridad que no existe unidad con su líder nacional y contrario a ello, es una fracción panista que se manifiesta en Puebla a favor del gobernador y no al presidente nacional del partido”, sentenció el analista.
División y resta electoral
En un recuento, Paulino Arellanes Jiménez, dijo que los insultos vertidos por el senador de la república, en contra del presidente de su partido, generará divisiones evidentes rumbo al proceso electoral federal, por lo que seguramente se verá reflejado en las urnas, el próximo 7 de junio.
Y es que la decisión de la comisión permanente del CEN del PAN, se presentará ya arrancadas las campañas políticas, por lo que no representa buen augurio para los candidatos del PAN y menos para los aspirantes impulsados por el grupo morenovallista.
La percepción social que prevalece en la actualidad, es que existe mucho descontento social en contra del gobernador del Estado, por lo que además, será otro elemento que abone a la poca participación ciudadana en las votaciones.
Cabe recordar que el abstencionismo, siempre resulta de beneficio para el PRI, que tiene un voto duro, claro y contundente en procesos electorales donde la sociedad no sale a votar.
Enfrentamiento debilita al panismo
Es por eso, que el análisis político, indica que los ataques de Javier Lozano Alarcón, en contra de Gustavo Madero, representan debilidad para el panismo poblano, “indudablemente, porque eso le permite salir ganador al PRI, que ha venido manifestando cierta unidad, contrario al PAN”.
Y no solamente afectará su votación a nivel nacional, sino que se reflejará con mayor intensidad en el Estado de Puebla, lugar de origen del senador y de su jefe político, el gobernador del Estado, “son ataques internos que se verán en las urnas”.
Finalmente, sentenció que en el PAN nacional no hay una figura política que tenga la fuerza suficiente para unificar a los grupos de ese partido político, por lo que al no reflejarse unidad, cada líder buscará jalar agua para su molino.
