Durante una ceremonia en la basílica catedral, previa a la festividad de San José, fueron ordenados Isaac Samuel Martínez Sánchez, de la comunidad parroquial de Agua Santa; Juan Gabriel Meza Guzmán, de Chiapas; Carlos Gabriel Morales Quiroz, originario de Toluca; y Riky Romero Reyes, de la comunidad parroquial de San Martín Texmelucan.
Durante la ceremonia, donde se reunieron cientos de fieles para acompañar a los ordenados, el arzobispo reconoció que en los últimos tres años, a raíz de las intensas visitas pastorales, se ha incrementado el número de jóvenes que ingresan a estudiar al seminario que fundó hace 371 años el obispo Juan de Palafox.
Manteniendo el ritual de la ordenación, Sánchez Espinosa, acompañado de los obispos auxiliares Tomás López Durán, así como Felipe Pozos Lorenzini, llamó a los nuevos ministros a trabajar de inmediato con el pueblo.
Señaló que desde el viernes tendrán que presentarse a los templos a los que fueron asignados, y desde ese momento deberán atender a los católicos.
Los llamó a tener la obediencia al papa Francisco y a los obispos, siguiendo la Iglesia misionera y transmitiendo la palabra de Cristo, y les dijo que deben creer en lo que predican.
Los nuevos sacerdotes juraron obediencia al arzobispo y obispos auxiliares, postrados en el altar mayor de la catedral.

Pedir por las vocaciones

El arzobispo indicó que se ha incrementado el número de ordenaciones, que hace cuatro años sólo fue de tres y ahora serán 15, y el próximo año se espera que sean otros 14 para atender a los católicos en Puebla.
Señaló que los jóvenes de las zonas urbanas difícilmente sienten la vocación por el sacerdocio. “Quienes ingresaron este año al Seminario Palafoxiano provienen principalmente del interior del estado”.
El arzobispo comentó que aun cuando para el siguiente curso el número de seminaristas no es el que se quisiera, ya existe un aumento en comparación con años anteriores.
El ministro explicó: “Cuando yo llegué eran poco menos de 100 en el Seminario Mayor, y ahora inicié el curso escolar y empiezan 160, o sea, casi un 60% más”.
Sánchez Espinosa añadió: “Pues aún andamos un poco bajito, yo quisiera que mi seminario sean mas”.
Cuestionado sobre la tarea que realizará, dijo: “Voy a hacer un trabajo pastoral más intenso, e incluso ir a las comunidades de las parroquias. Mi personal y oficina están aquí, pero quiero que existan en todas partes de la arquidiócesis. Sin embargo, para mí fue un número considerable, aunque poquito”.

No hay interés

Al preguntarle de qué comunidades provienen los nuevos seminaristas, declaró que son de todas las zonas, aunque en la urbana es menor.
Reconoció que generalmente las vocaciones surgen más de las comunidades de fuera de la ciudad, ya en las zonas urbanas es más difícil.
Señaló que el seminario de la ciudad de México son una mínima parte de jóvenes de la capital los que ingresan, la mayoría van de la provincia.
Recordó que el papa Francisco ha pedido a los sacerdotes que vayan a las comunidades, que sigan los ejemplos de ser peregrinos y la mejor forma de llegar a la gente es conocer su cultura, sus costumbres y llevarles la palabra y la fe.
Sánchez Espinosa recordó al fundador, el beato Juan de Palafox, quien no sólo construyó un seminario, sino que colaboró para la construcción de una ciudad, y su legado se ha mantenido durante casi cuatro siglos.

Nuevos sacerdotes

•    Isaac Samuel Martínez Sánchez, de Agua Santa
•    Juan Gabriel Meza Guzmán, de Chiapas
•    Carlos Gabriel Morales Quiroz, de Toluca
•    Riky Romero Reyes, de San Martín Texmelucan


Los celebrantes

•    Víctor Sánchez Espinosa, arzobispo
•    Tomás López Durán, obispo auxiliar
•    Felipe Pozos Lorenzini, obispo auxiliar