Fausto Montes García estuvo siete meses preso; ahora, tiene todas las posibilidades de contrademandar al gobierno del Estado, luego que ya fue liberado por desvanecimiento de pruebas.
Su liberación —la noche del pasado jueves— también permitirá sentar un precedente para que los demás presos por la misma trifulca queden en libertad, reveló Germán Molina Carrillo, director del Instituto de Ciencias Jurídicas.
 “Porque si no se pudo aplicar responsabilidades a uno, tampoco se le aplica a los demás”, señaló el analista.    
Es evidente, dijo el analista jurídico, que no se pueden comparar las armas que llevaban los policías, desde el armamento, los chalecos, y los gases lacrimógenos, contra lo que pueden tener los pobladores, “en lo que hay una diferencia muy amplia”.
Por eso, dijo que lo más seguro, es que el resto de los presos políticos por la represión de Chalchihuapan, también pueden obtener su libertad en el corto tiempo, “aunque en Puebla, desafortunadamente, lo que sucede es que salen por un delito y les fabrican otro”.
Por eso, aseguró que en la entidad poblana se vive una persecución y criminalización muy fuerte, porque en la liberación de Fausto Montes García es factible pensar que la decisión de su liberación no se presentó en el ámbito estatal sino desde las autoridades federales.
“El proceso fue mal manejado jurídicamente de parte de la Procuraduría de Justicia del Estado, que no respetó los protocolos de la ley Bala y prueba de ello es que los policías que participaron en el enfrentamiento, se encuentran en libertad”.    
Lo que corresponde a Fausto Montes García es que presente las contrademandas que corresponden en contra de las autoridades poblanas, porque su liberación deja la lectura que no hubo un adecuado proceso para su persona y estuvo en prisión, de manera injustificada durante 7 meses.
“Yo creo que podría entablar una demanda en contra de los responsables, para que puedan resarcirle los daños que le causaron por la privación ilegal de su libertad”, dijo Molina Carrillo, “como no había elementos, sí puede iniciar una acción en contra de las autoridades que intervinieron en su detención”.    
“El habitante de Chalchihuapan puede justificar fácilmente el daño moral, el daño en su patrimonio y el desgaste que vivió durante el proceso, pero además, hubo afectaciones en su familia, en su espacio laboral y en su vida emocional”.
Seguro que tiene las posibilidades de demandar, aseguró, pero también el resto de los aprehendidos por el mismo caso, tienen grandes posibilidades de quedar en libertad, siempre que lleven un proceso adecuado, ante la federación.
    
La liberación de Fausto Montes García demuestra que habitantes no fueron responsables, puntualiza Germán Molina Carrillo, director del Instituto de Ciencias Jurídicas. Además,  indica que el gobierno “no respetó los protocolos mínimos en el caso y metió a la cárcel a un grupo de inocentes”.