Fueron removidos elementos de la Policía Ministerial adscritos a la localidad de Atencingo, tras acusaciones de corrupción y contubernio con delincuentes de la zona.
Y es que la zona sur del Estado se ha vuelto una de las más peligrosas, lo que desde hace más de cuatro años han venido acusando pobladores, pero no se ha hecho nada hasta el momento.
Esta semana, habitantes de dicha junta auxiliar de Chietla, al sur del estado, se rebelaron contra las Policías municipal y ministerial, en una protesta, en la que cerraron los accesos a la comunidad por 12 horas.
Por la mañana de este sábado los elementos Ministeriales con apoyo de la Policía Municipal de Chietla retiraron sus pertenencias de la Comisaría que mantenían en la Colonia La Cruz.
Mantuvieron cerrado el paso por varias horas, bloqueada la calle con una patrulla y cinta.
Dos días antes, en la manifestación mostraron cartulinas con leyendas como "las autoridades Ministeriales no apoyan, las queremos ¡fuera! por qué protegen a los rateros”.
Y es que denunciaron que incluso se les ha llegado a ver a los elementos policiacos con delincuentes y policías conviviendo en una carne asada, tomando cervezas y whisky.
Luego de la protesta, fuentes de la misma comunidad informaron a Intolerancia Diario, que al menos los ocho elementos de la Procuraduría de Puebla fueron removidos, mientras se hace una investigación.
 
Las exigencias

Este viernes, nuevamente iban a cerrar la carretera los pobladores, para una segunda protesta, lo que fue impedido mediante el diálogo con autoridades bajo la promesa de la remoción de elementos.
Los habitantes de la comunidad que tiene como sede el ingenio más grande del país, exigen al presidente municipal de su cabecera Chietla, Edgardo Ponce Cortés la destitución del director de la Policía Municipal, Oswaldo Osorno y al Procurador de justicia, Víctor Antonio Carrancá Bourguet, el despido del Comandante de la Ministerial.
Acusaron a elementos de la Policía Municipal de Chietla y agentes de la Policía Ministerial de estar coludidos con ladrones, asaltantes y extorsionadores.
Según el portal de noticias local La Zafra, fueron alrededor de 200 personas, las que bloquearon el acceso y salida de la población el pasado miércoles, donde impidieron la comunicación a municipios del sur del estado a la altura de la Barranca del Barro. Argumentaron que Atencingo está en manos de la delincuencia, los robos, asaltos, extorsiones, agresiones, robo de auto partes y vehículos se han vuelto el pan de cada día.
Indicaron que nada sirve que el presidente municipal, Edgardo Ponce Cortés y el Director de la Policía, Oswaldo Osorno, sean originarios de Atencingo.
“Sólo las patrullas hacen rondas por sus domicilios, para que estén seguras sus familias, pero lo que le pase a un ciudadanos comunes y corrientes no les importa.”
Los inconformes comentaron que a inicios de esta semana fue capturado un presunto ladrón, lo trasladaron al municipio de Chietla y de ahí lo enviaron a la casa de Justicia en Izúcar de Matamoros, sin embargo no se ejerció acción legal en su contra y fue liberado.
Dijeron que no es la primera vez que liberan a los ladrones, por lo que están hartos  de la impunidad en robos a casa habitación, transeúnte y autopartes.
Señalaron que a pesar de que en la presente administración se instaló una comandancia en Atencingo, no ha funcionado, por lo que también pidieron al alcalde solicite  la presencia de la policía estatal o del ejército mexicano. 
 

La advertencia

En octubre de 2011, habitantes del sur del estado, denunciaron que los secuestros exprés, asaltos a transeúntes, robos a casa-habitación, comercio informal, prostitución eran los problemas que más aquejaban
Un año después, un grupo de secuestradores fue linchado por pobladores de Chietla.
A cerca de tres años de distancia la situación sigue igual, según señalan.
Entonces la Unión Regional de Vecinos, señaló a Intolerancia Diario, que los problemas han sido presentados a las autoridades municipales, sin que hasta la fecha haya alguna solución.
Acusaron de corrupción a elementos de la policía municipal de estar coludidos con grupos de delincuentes que han azotado al municipio.
La Unión Regional de Vecinos de Izúcar de Matamoros para la Defensa de los Ciudadanos Asociación Civil, hicieron cuatro peticiones por escrito entre el 5 de agosto, hasta el 12 de septiembre del 2011.
El organismo no gubernamental (ONG) fue constituido oficialmente en 1998, por lo que ante la situación que predomina en la ciudad ubicada al sur de la capital de Puebla, hizo que se reactivara el movimiento.
En abril de 2012 se registró el linchamiento de tres secuestradores en el municipio de Chietla y lesionaron de gravedad a un cuarto delincuente.
Todo ese tiempo el gobierno del estado mantuvo hermetismo, luego de que elementos policiacos estatales y hasta el Ejército Mexicano,  fueron rebasados por la turba y ni siquiera pudieron ingresar a las comunidades.
Los presuntos secuestradores fueron asesinados por la población en la comunidad rural de El Aguacate, perteneciente al municipio de Chietla, luego de que intentaron privar de la libertad a una joven de la zona.
Luego de montar alrededor de mil personas una búsqueda de los plagiarios y la víctima, lograron detenerlos.
Pero fueron ubicados y detenidos tres individuos, tras secuestrar  a la hija de un importante ganadero de la región.
Detuvieron a Hugo García Ramírez de 33 años y Miguel Ángel López Silva de 20, ambos vecinos de la junta auxiliar de Raboso, perteneciente a Izúcar de Matamoros, tras varias horas de estar retenidos por el pueblo enardecido, ambos fueron muertos a balazos. 
Esto luego de una paliza les aplicaron la "Ley Fuga" al señalarles que corrieran y, si lograban escapar, serían libres.
Dos de ellos corrieron, pero fueron abatidos a tiros por la espalda cuando apenas empezaron a correr.
Los tres sujetos presuntamente formaban parte de la banda conocida como "Los Pelones", asentada en la comunidad de Raboso. 

Más inseguridad

Apenas en abril pasado, el preescolar Mariano Piña Olaya, ubicado en Atencingo, fue robado durante el periodo vacacional. Lo que motivo el cierre de la carretera de acceso y salida de la localidad.
Los responsables del plantel se percataron de los hechos hasta que regresaron a clases lo que ocasionó la molestia de los pobladores.
Directivos, maestros y alumnos se dieron cuenta que la escuela había sido robada en Semana Santa, por lo que cerraron durante algunas horas la carretera Atencingo-Chietla para exigir mayor seguridad.
Hasta el momento se sabe que los amantes de lo ajeno lograron extraer equipo de cómputo que había en la dirección, así como otros materiales que emplean profesoras para las clases.
Cabe mencionar que el cierre fue efectuado por un grupo de 40 tutores, quienes  decidieron pedir solución para frenar la inseguridad en Atencingo.
Para María Rosa Cajero, habitante de Atencingo, en las últimas fechas el robo a casa habitación se ha incrementado a pesar de que el lugar cuenta con una base de operación de la policía municipal  para prestar auxilio.
Debido a lo anterior, Edgardo Ponce Cortés, presidente municipal de Chietla,  dialogó con el grupo de inconformes que reabrieron la vialidad

Puebla insegura

Un estudio del Instituto Ciudadano de Estudios sobre la Inseguridad (Icesi), reveló que la percepción de inseguridad en el estado el 6 por ciento  de la población piensa que ir a la escuela ya es un peligro, y otro 15 por ciento  ahora piensa que es peligroso ir a centros comerciales.
El 52% de los encuestados dejaron de usar joyas y un alto 51 por ciento  ya no permiten que sus hijos menores salgan solos a la calle, mientras que el 4 de cada diez jóvenes no sale de noche.
Pero quienes se atreven a salir, el 38 por ciento evita llevar dinero en efectivo y un 34 por ciento  no porta tarjetas de debito-crédito.
En 2009 el instituto el estudio señala que el 61 por ciento de la población cambiaron hábitos de consumo y de actividades en la entidad por miedo a ser víctimas de delitos o porque fueron victima de alguna situación delictiva o violenta.
Da por ejemplo la investigación que los robos, asesinatos, asaltos en carreteras, entre otros significan un costo de 6 mil 926 millones de pesos y como consecuencia del miedo o el exceso de precauciones, los poblanos gastaron más de mil 344 millones de pesos en medidas de auto protección, con alarmas, barrotes, armas, guardias privados, autos blindados, cámaras de
Lo anterior que representa un promedio de 4, 300 pesos por habitante, una cifra alta en comparación a que en 2009 los poblanos pagaron 288.38 millones de pesos en primas por robo de vehículo.
Las pérdidas económicas por inseguridad y violencia son resultado del impacto o la percepción de inseguridad y la violencia entre la población lo que genera limitantes en las actividades diarias de los habitantes, principalmente en su entorno laboral-escolar.