El presidente de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), Joseph Blatter, aseguró que no puede ser considerado responsable por las acciones de funcionarios que empañan la reputación del organismo.


“Muchos me hacen responsable de la reputación del futbol mundial”, dijo Blatter en la ceremonia de apertura del congreso anual del organismo.

 

 

"Yo no puedo monitorear a todos", afirmó el presidente de FIFA en referencia a los siete funcionarios del organismo que fueron detenidos por cargos de corrupción, lavado de dinero, tráfico de influencias y fraude electrónico.

 

 

"No podemos permitir que la reputación del futbol sea arrastrada hacia el lodo y eso debe terminar aquí y ahora”, indicó el funcionario suizo, que lleva 20 años al frente de FIFA.

 

Blatter condenó “las acciones de individuos” por traer “vergüenza y humillación” al organismo rector del futbol y enfatizó que aquellos que “corrompieron el futbol son una minoría” y deben ser responsables de sus acciones.

 

 

El presidente del organismo, quien se notaba nervioso y con un tono de voz entrecortado, reconoció que “son tiempos difíciles para FIFA'', al asegurar que en la organización “no hay lugar para corrupción de ningún tipo”.


Además, admitió que “se necesita hacer mucho más”, para que cada miembro de la organización se comporte con responsabilidad y ética.
Llamó a los presentes a seguir con la ceremonia tal como se había planeado, a continuar con el espectáculo del futbol y abrigar una actitud de unidad solidaria en torno a la alegría que brinda este deporte.


FIFA debe someterse a revisión: Presidenta de APCE 

"Para ser creíble, la FIFA debe expulsar a la gente indeseable y revisar su gobernanza", declaró AnneBrasseur, presidenta de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (APCE).
Brasseur hizo las declaraciones después de los arrestos del miércoles por cargos de corrupción a importantes funcionarios de la FIFA en Zurich, dos días antes de la reunión anual más importante del órgano rector del fútbol a nivel mundial.
"El órgano mundial del futbol se ve sacudido de nuevo por un indescritptible escándalo dos días antes de su Congreso. Cualquiera que sea el resultado de la investigación, es imperativo que la FIFA siga reformando la gobernanza de esta organización", añadió la presidenta.
Nueve de los 14 arrestados son ex ejecutivos o ejecutivos actuales de la FIFA y son acusados de fraude y de solicitar sobornos por 150 millones de dólares en los últimos 30 años en una investigación por corrupción de Estados Unidos.
El caso estadounidense argumenta que los hombres corrompieron el mundo del fútbol para beneficiarse financieramente.
"Estos arrestos no son una sorpresa, dado que se han hecho críticas durante muchos años", afirmó Brasseur.
Junto con la investigación de los funcionarios por corrupción, la policía suiza anunció una investigación penal de los procesos de elección de la sede de las Copas Mundiales 2018 y 2022 concedidas a Rusia y Qatar, respectivamente.
La propia asamblea general de la APCE aprobó en abril una resolución en la que pidió a la FIFA volver a realizar el proceso para definir la sede la Copa Mundial 2022 y señaló que el proceso de selección "fue socavado de manera fundamental por la ilegalidad", después de evidencias encontradas que indicaron que se hicieron pagos irregulares de grandes sumas para garantizar los votos a favor de la propuesta de Qatar.
"Debe haber acciones rápidas para proteger el fútbol, que es la víctima de estos escándalos sin fin. El fútbol, y los deportes en general, no deben convertirse en zonas sin ley. Necesitamos una FIFA reformada, capaz de defender los derechos humanos, la ética y el espíritu deportivo, empezando con Qatar", declaró la presidenta.
Aunque el ex vicepresidente de la FIFA, Jack Warner, y el actual vicepresidente Jeffrey Webb fueron acusados, el presidente Sepp Blatter no ha sido acusado.
Sin embargo, Blatter se encuentra sometido a una creciente presión para dimitir luego de que patrocinadores corporativos de primer nivel como Adidas, Coca-Cola y Visa mostraron su decepción con la FIFA y después de que líderes mundiales como David Cameron pidieron en público a Blatter que renuncie.
En general, se consideraba que Blatter sería reelegido este viernes para un quinto período como presidente del órgano rector del fútbol a nivel mundial. 
Incluso si elige no dimitir, grupos como la UEFA, el órgano rector del fútbol en Europa, amenazan con boicotear la votación si no es aplazada.