Las fuerzas especiales de Mali pusieron fin a una toma de rehenes en un hotel lujoso en la capital del país, Bamako, y al menos 22 personas murieron.

El ministro de Seguridad, Salif Traore, dijo que ya no hay rehenes en el hotel Radisson Blu, horas después de que hombres armados irrumpieran en el lugar y tomaran como rehenes a 170 personas, muchas de ellas extranjeras.

Pero fuentes de seguridad indicaron que las fuerzas de Mali siguen en el proceso de asegurar el hotel porque todavía hay hombres armados que se resisten dentro del edificio de siete pisos.

Las fuentes añadieron que dos atacantes murieron, pero aún se desconoce si los atacantes son parte de las 22 víctimas.

La operación de rescate de las fuerzas especiales de Mali recibió apoyo de la Misión Multidimensional de Estabilización Integrada de Naciones Unidas en Mali (Minusma, por sus siglas en inglés) y de tropas estadounidenses y francesas.

Los hombres armados entraron al hotel de 190 habitaciones que albergaba a 140 personas de distintas nacionalidades en un auto con matrículas diplomáticas, indicó Traore.

Algunos rehenes lograron escapar por sus propios medios, pero la mayoría fue rescatada por las fuerzas especiales.