Ana Teresa Aranda Orozco indicó que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación dieron un duro revés al gobernador y a sus lacayos al señalarles la inconstitucionalidad de la reforma, pero además les amarra las manos para que no puedan legislar a su conveniencia.
Entrevistada al término de la sesión, indicó que ya no hace falta acudir a las instancias internacionales ya que los ministros estuvieron a la altura del reclamo social ante la acción de un proyecto personal que buscaba impedir que surgieran voces independientes.
Comentó que lo que se ve ahora “es el ridículo de un Congreso del Estado, donde hubo diputados que también se portaron a la altura de las circunstancias, pero al final con una mayoría que está al servicio del gobernador perdieron en la votación”.
Dijo que ahora ya se eliminó lo referente a la territorialidad para conseguir las firmas de 147 municipios y ya no habrá un número establecido, se puede lograr el número de firmar en los municipios con mayor población.
Del tres por ciento de las firmas del listado nominal, dijo que es correcto ya que si un ciudadano aspira a ser gobernador lo primero que debe hacer es contar con una estructura y las firmas que se recopilen permiten crear el equipo para ganar.
Señaló que ahora al eliminarse el requisito de presentarse a las oficinas del órgano electoral para firmar el apoyo se demuestra que se tenía razón desde un principio en el sentido de que era un absurdo imposible de que se cumpliera.
Se equivocaron
En tanto el diputado del Partido del Trabajo (PT), Mariano Hernández Reyes, admitió que el  Congreso de Puebla cometió “una equivocación” en la aprobación de la reforma a la ley electoral y tendrá que aceptar le haya corregido la plana la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Reconoció que esta fuerza política respaldó el dictamen aprobado en el mes de agosto considerando que los candidatos independientes para poder competir en los procesos electorales debían cumplir con los mismos requisitos que un partido político.
Comentó  que establecer el tres por ciento de las firmas del padrón electoral para lograr una candidatura y la presentación de las personas que apoyan a un ciudadano no fue un exceso aunque reconoció que el plazo de 20 días para cumplir este requisito si lo fue.
“Creo que tuvimos una equivocación y se quería de más tiempo pero el tres por ciento sigue fijo (...) Relativamente deja mal parado al Congreso, creo que siempre debemos aceptar las cosas para ir por buen camino pero insisto para un partido te piden el tres por ciento (...) No nos deja un mal sabor de boca porque al final tampoco somos la mayoría únicamente somos dos diputados del PT en el Congreso”.
Hernández Reyes, consideró que una vez que la SCJN emita su fallo sobre las impugnaciones presentadas en contra de las reformas a la Ley Electoral de Puebla el Poder Legislativo deberá realiza las modificaciones pertinentes para ajustar este ordenamiento en el menor tiempo posible.