El año 2015 representó para Acción Nacional un retroceso,  en el proceso electoral federal perdieran nueve de 16 distritos electorales en Puebla; además, se presentó la renuncia de militantes de la vieja guardia como Ana Teresa Aranda Orozco, sin olvidar el golpe del morenovallismo para quedarse con el Comité Estatal.

En el mes de enero, durante el registro de los candidatos a diputados federales fue nombrada una comisión a modo encabezada por la entonces diputada federal Blanca Jiménez Castillo, quien a puerta cerrada y en medio de la opacidad hicieron los trámites sin notificar —ni siquiera por cortesía— al Comité Directivo Estatal, encabezado por Rafael Micalco Méndez.

Dicha comisión negó el registro a la panista tradicional Leonor Popócatl, quien tuvo que recurrir a los tribunales para participar por el distrito 13 con cabecera en Atlixco, aunque ganó la designación de su partido, a la postre perdió la elección.

Elección al viejo estilo PRI

El 22 de febrero, con gente de las colonias de la periferia y una mínima asistencia de miembros activos del PAN, los aspirantes a las candidaturas a diputados federales del albiazul por la capital llenaron las casillas donde se entregaron las boletas para que votaran por ellos.

Al realizarse la consulta para ratificar las candidaturas únicas de Acción Nacional en la capital se aprobó la participación abierta de ciudadanos. Así los aspirantes Francisco Xabier Albizuri Morett (por el distrito 6); Genoveva Huerta Villegas (distrito 9);  Angélica Ramírez Luna (distrito 11) y Ángel Francisco Javier Trauwitz Echeguren (distrito 12), utilizaron el acarreo de votantes no panistas ante el poco interés de la militancia.

En los recorridos se apreció como bajaban de autobuses del transporte público, decenas de personas de colonias populares, para ser conducidas a las casillas a que tacharan el nombre del aspirante. 

Los asistentes al centro de votación en el distrito 9, donde la candidata fue Genoveva Huerta y la suplente Patricia Leal Islas, tuvieron que pasar lista en el Paseo Bravo donde una mujer con una libreta anotaba los nombres y las direcciones.

La ruptura

El pasado 5 de abril, los candidatos morenovallistas rompen con el dirigente estatal, Rafael Micalco Méndez, a quien no lo invitaron al acto de arranque de campaña, y en el lugar estuvieron funcionarios del gobierno estatal y del ayuntamiento.

Asimismo, quitaron a candidatos electos que no fueron del agrado del ejecutivo, al darse a conocer los ajustes en las candidaturas Rafael Micalco Méndez, dirigente estatal del PAN, advirtió que los cambios en los distritos de Atlixco (13), Tehuacán (15) y Ajalpan (16) se dieron por presiones y manifestó que fue una falta de respeto al proceso democrático que se dio en su partido para elegir a sus aspirantes a la Cámara de Diputados.

El revés electoral 

La mañana del 7 de junio, el morenovallismo presumía la ventaja en 13 de los 16 distritos; incluso, por la noche realizaron la caravana de la victoria asegurando que habían ganado los cuatro distritos de la capital; sin embargo, unas horas después se les informaba que únicamente ganaron uno.

El 8 de junio llegaron las excusas, el senador Javier Lozano Alarcón dijo que la derrota se debía a que no fueron en alianza y el PRI sí; en tanto, el dirigente del Comité Municipal, Pablo Rodríguez Regordosa, insistía en que había un empate con ocho distritos para el PRI y ocho para ellos. Al final, el PRI les arrebató 9 de los 16 distritos de Puebla. 

No obstante, Javier Lozano intentó justificar la debacle electoral, aseguró que fue como consecuencia de la alianza que logró establecer el PRI con el Verde Ecologista; además, indicó que era el segundo mayor número de diputaciones que gana el albiazul en la historia de Puebla, cuando en el 2006 alcanzó 12.

A pesar de que en la votación total por partido, de acuerdo a las cifras del Programa de Resultados Electorales Preliminares, existía una diferencia de 32 mil votos a favor del PRI.

La guerra interna

El 15 de junio fueron enviados burócratas estatales y gente de las colonias del sur a las instalaciones de Acción Nacional para exigir la renuncia de Rafael Micalco; en tanto, Roberto Grajales recabó firmas en el Consejo Nacional para exigir la destitución, pero no tuvo eco y el respaldo lo recibió el dirigente estatal.

En el mes de agosto, Rafael Micalco Méndez reconoció que desde finales de 2014 no había interlocución con el gobernador Rafael Moreno Valle e hizo un llamado a mantener el respeto.

El control de la dirección

Desde Casa Puebla se orquestó la elección interna para renovar la dirigencia estatal, en donde se registró sólo una planilla, en ella estaba como secretaria general, Martha Erika Alonso, esposa del gobernador Rafael Moreno Valle, y como presidente, Jesús Giles.

El 18 de octubre, sin que se contabilizaran los votos nulos o en contra, la planilla única conformada por Giles y Alonso de Moreno Valle ganó la elección interna para dirigir el Partido Acción Nacional en Puebla a partir del próximo 17 de diciembre.

La jornada para la unción oficial contó con el acarreo de militantes en la capital, pese a ello sólo se logró la participación del 43 por ciento de los inscritos en el padrón en el municipio más poblado del estado.

Al cerrar las casillas se apreció la mayor votación en el distrito 6 cuyas casillas estuvieron instaladas en San Francisco, ahí fueron llevadas personas de las colonias Amalucan y Rivera Anaya y trascendió que los vecinos de La Resurrección se negaron a participar.

En el bastión panista, el Barrio de Santiago, en ninguna de las tres casillas instaladas, la votación rebasó los 280 votos.

Durante la jornada se vio la presencia de muy pocos panistas doctrinarios, el único fue Francisco Fraile García, quien previo a la jornada electoral sostuvo un encuentro con la dupla Martha Erika–Jesús Giles.

Las renuncias

La crisis en Acción Nacional se agudizó conforme avanzó el año; en 2015 se presentaron las renuncias de dos panistas de cepa, Ana Teresa Aranda Orozco y Pedro Plaza Montaño, éste último denunció que la corrupción, compra de voluntades, decisiones en contra de los ciudadanos y la pérdida de valores al interior de Acción Nacional, lo obligaron a renunciar al partido en donde militó durante 32 años; además, indicó que los gobiernos emanados del PAN “ya no gobiernan con sus principios”.

En entrevista, Plaza Montaño recordó que desde los veinte años fue militante activo de Acción Nacional, “en ese tiempo ser panista significaba el aportar, pensar en el bien común, ayudar a los demás, sin embargo ahora se trata de intereses personales o de grupo los que se protegen”.

Dijo que la gota que derramó el vaso y que generó que enviara la carta de renuncia al entonces presidente nacional del PAN, Gustavo Madero Muñoz, fue la elección que se llevaría a cabo el 16 de agosto donde no se cumplió con los principios, “ahí se está viendo la afiliación corporativa, el uso de recursos públicos, una manipulación de la elección”.

El 15 de octubre, Ana Teresa Aranda Orozco ratificó su renuncia al Partido Acción Nacional y dijo que desde el pasado 20 de abril entregó el documento al dirigente estatal Rafael Micalco Méndez.

La panista de viejo cuño señaló que a nivel local el instituto político se convirtió en una “franquicia al servicio de los intereses mezquinos”; además,  “no tienen ningún reparo en pisotear una y otra vez lo que los panistas juraron defender”.

La hoy expanista que fue secretaria de estado a nivel federal y directora nacional del DIF. En el escenario nacional, aclaró, quedan amigos con trayectorias intachables, “con los que compartí ideales y trinchera, mismos que siguen confiando en que se puede rescatar el magnífico instrumento que fue generador de bienes públicos”.

Insistió en que los respeta y admira; además, les agradeció su apoyo, pero ella decidió ya no estar dentro del Partido Acción Nacional.

Dijo que hay razones que hacen imposible seguir militando en Acción Nacional, y solicitó a Rafael Micalco que de cauce legal a su renuncia.

Sobre su futuro dijo que seguirá luchando “por la democratización y la dignificación de la vida pública en México”.

Tome nota

En el mes de agosto, Rafael Micalco Méndez reconoció que desde finales de 2014 no había interlocución con el gobernador Rafael Moreno Valle e hizo un llamado a mantener el respeto.

La fecha

El 18 de octubre, la planilla conformada por Giles y Alonso de Moreno Valle gana la elección interna para dirigir el Partido Acción Nacional.