El impacto ambiental en Puebla incrementa porque el 85 por ciento de sus 217 municipios son endebles en sustentabilidad, al carecer de programas y políticas públicas para garantizar la permanencia del medio ambiente y evitar que el crecimiento humano irrumpa de forma nociva en el entorno. La Ibero Puebla, con la maestría en Hábitat y Equidad Socio Territorial, responderá a la ausencia de las iniciativas con alternativas sólidas y eficaces.
Emma Morales García de Alba, explicó que la equidad Socio Territorial se alcanzará con programas bien sustentados en acceso a servicios básicos, vivienda digna, educación, salud y transportes colectivos eficientes.
En conferencia de prensa, los profesores del programa –Francisco Valverde Díaz de León y Emma Morales García de Alba– coincidieron en la urgencia para atender este conflicto, que en caso de acentuarse, provocará un gran desequilibrio social en donde los afectados de manera grave serán los pobladores del Estado.
Los nuevos programas educativos incidirán en el crecimiento urbano, incremento de asentamientos informales, cambios en la estructura familiar, servicios urbanos, inclusión e inequidad en temas esenciales de desarrollo, inseguridad y migración; además del cambio climático por ser un tema toral en territorio estatal, en México y el mundo.
La nueva maestría de la Ibero ‘Hábitat y Equidad Socio Territorial’ tiene bien encausados sus temas de estudio para ponerlos a la disposición de los habitantes de Puebla porque intentará dar solución con programas serios a las adversidades del impacto ambiental.
"Esta equidad socio territorial tiene que ver con acceso a oportunidades, es decir que todos tengamos acceso a los servicios básicos, a transporte de calidad, vivienda, educación y salud", puntualizó la directora de la investigadora de la UIA, Emma Regina Morales.
De acuerdo con la también maestra en Estudios y Gestión de la ciudad, el área metropolitana Puebla-Tlaxcala ocupa la cuarta zona más grande de México y en treinta años se ha expandido ocho veces más su población.
De ahí la necesidad de resolver problemáticas como son el despoblamiento del centro, servicios básicos, acceso al transporte, agua potable, salud, educación y trabajo.
Los programas de estudio estarán enfocados también en el desarrollo social, en educación y creación de políticas públicas en el marco de procesos educativos, en la construcción de ciudadanía y defensa en los derechos humanos, en la incidencia en productividad y acometividad social y desarrollo urbano territorial, pero desde una perspectiva de sustentabilidad y cultural.
En este sentido dijo que la universidad, a través de esta maestría, pretende incidir en la construcción de personas con una perspectiva de carácter internacional para resolver los problemas del medio ambiente y la conservación de los recursos naturales.
La maestría nace también como una respuesta a las cuatro décadas de institucionalización de la planeación urbana y ordenamiento territorial en México, establecido en 1976 y en el marco de la conferencia de Naciones Unidas Hábitat III de Quito, en donde se definirá la agenda urbana mundial de los próximos 20 años.
Una de cada 10 personas vivirán en áreas urbanas
De acuerdo a ONU-Hábitat, el programa de Naciones Unidas trabaja por un mejor futuro urbano y su finalidad es promover el desarrollo de asentamientos sustentables desde el punto de vista social y medioambiental para proporcionar una vida de calidad a todos. También estima que para el 2030, seis de cada 10 personas en el globo vivan en áreas urbanas, con lo que la crisis se acentuará pero con planes de estudios fuertes se puede ayudar a evitar el caos.
