Los monitores se están convirtiendo en una de las principales formas de entretenimiento para aquellos que eligen no invertir en una televisión, pero desean ver películas y jugar videojuegos.

Los modelos curvos CF590 y CF591 de Samsung son la más reciente apuesta de la empresa coreana en el mercado mexicano. Con tamaños de 24 y 27 pulgadas, el rango de precios va desde los 5,000 hasta los 8,499 pesos.

 

Lo bueno

El rango de contraste, de 3000:1 es espectacular. En imágenes fijas o con movimientos suaves, se observa perfectamente una amplia gama de tonalidades, sombras y luces. Aunque algunos colores pueden llegar a quemarse un poco, esto prácticamente no se nota.

En el modo Eye Saver Mode, las tonalidades cambian de azules a rojo, lo que permite a los ojos reducir la fatiga de pasar varias horas frente al equipo. Los ojos en verdad sienten la diferencia después de tan solo unos minutos utilizando luz normal.

 

Lo malo

La curvatura del monitor, con un radio de 1,800 mm, realmente te hace sentir inmerso en lo que está en la pantalla, sin embargo, si no estás centrado frente al equipo, el efecto se pierde rápidamente, por lo que no es tan bueno para, por ejemplo, ver películas con compañía.

Cuando hay movimientos muy bruscos en alta definición, la imagen tiende a romperse un poco. Esto se nota mucho, ya que el resto se mantiene cristalina con su resolución de 1920 x 1080.

 

El veredicto

Este equipo está pensado para jugadores moderados, por lo que no es recomendable para un profesional de los videojuegos. Sin embargo, si lo que buscas es un monitor para ver películas con gran calidad y que te ayude a proteger la mirada, ding, ding, has encontrado un ganador.