Las obras de tendido del concreto hidráulico, presumidas con bombo y platillo por el gobernador, Rafael Moreno Valle Rosas, en las principales vialidades de la ciudad por su calidad de clase mundial y porque perdurarían dos décadas, han puesto en duda la palabra garantizada del aspirante a obtener la candidatura a la presidencia por Acción Nacional.

La mala calidad del  cemento hidráulico que  Moreno Valle presumía en cada inauguración es factor común no solo en un carril de las laterales del Bulevar 5 de Mayo que “corre” de sur a norte sino en la carpeta del Nodo Vial 485 que, semanas atrás, sufrió una “cirugía” en uno de sus carriles de norte a sur.

El caso de la Avenida Las Torres no es detalle menor porque, durante los meses de septiembre y diciembre pasados, la carpeta del concreto hidráulico fue levantada en su totalidad.

Las obras de concreto de hidráulico que llegaron para quedarse, así presumía el gobernador en cada inauguración, no respondieron al paso del tiempo ni a un sexenio.

Cementos Mexicanos (Cemex) fue la empresa que tendió la carpeta de cemento hidráulico en el Bulevar 5 de Mayo, Las Torres y Esteban de Antuñano por las que cobró mil 377 millones de pesos. Pero eso sí, las grietas y las continuas reparaciones evidencian la clase mundial del material empleado en esas vitales vialidades de la Angelópolis.

Nuevamente aparecen fracturas el Bulevar 5 de Mayo

Ahora en el carril lateral que “corre” de sur a norte, mero en frente de Cinepolís del Bulevar, nuevamente aparecieron cuarteaduras al concreto hidráulico. La calidad de clase mundial del material no resistió el tránsito intenso cotidiano. Los estudios de resistencia de suelo en su planeación han sido reprobados una vez más.

Las grietas son evidentes desde cualquier punto de vista. Pero no existe movimiento para su reparación a pesar de que diariamente se profundizan por la fricción de los neumáticos y por el peso de las mismas unidades.

La pomposa rehabilitación del Bulevar 5 de Mayo ocurrió en febrero de 2013. Pero a lo largo del  mes de junio del 2014, en menos de 365 días de su inauguración, el concreto hidráulico de esa vialidad y con el entronque con la 14 Oriente tuvo que ser retirado totalmente dos veces para instalar las alcantarillas a la altura del Centro de Convenciones, después de las inundaciones que se presentaron ese año.  

Pero el concreto en septiembre del año anterior también se cuarteó a la altura de la avenida Juan de Palafox y Mendoza. La obra ejecutada por Cementos de México tuvo un costo 92.6 millones de pesos.

Las alcantarillas y la red de agua potable

Los trabajaos de rehabilitación de la 31 Oriente-Poniente, con un costo de 81.7 millones de pesos, evidenciaron problemas a semanas de ser inaugurados en mayo del 2014 porque en la vialidad de gran circulación se realizaron cortes al concreto para colocar las alcantarillas que la empresa encargada de la obra, Inmobiliaria Contramon S.A. de C.V., olvidó instalar.

Pero la mala planeación se notó otra vez en diciembre pasado cuando realizaron nuevos cortes al concreto  para reparar esa ruta entre la 33 y 29 Sur. Pero como siempre, la administración morenovallista dijo que solo se trataban de trabajos de “mantenimiento”.

En la obra del Circuito Juan Pablo II, un mes después de ser inaugurada en junio de 2014 y con un costó 102.8 millones de pesos, CEMEX olvidó colocar las alcantarillas que se instalaron con nuevas incisiones en unión con la 11 Sur.

Solo  tres meses de vida

El concreto hidráulico que la empresa Demovial S.A. de C.V. empezó a colocar en septiembre en la avenida Las Torres, sólo duró tres meses porque en  un fin de semana se registraron poco más  48 cuarteaduras a lo largo de la vialidad, que obligaron a la constructora a levantar el material y sustituirlo. La obra tuvo un costo de 449.4 millones de pesos.

En esa ocasión, la Secretaría de Infraestructura (SI) confirmó que las reparaciones se realizarían en los tramos  entre la 11 Sur a la Avenida Nacional y de la 10 a la 14 Sur, en el carril que corre a La Margarita.