El programa Una Apuesta de Futuro da la bienvenida a su décima generación, este programa ayuda a jóvenes provenientes de la Sierra Norte de Puebla y de las zonas más apartadas para que puedan realizar sus estudios universitarios en la UPAEP, señaló Antonio Sánchez Díaz de Rivera, Director General de Vinculación.

Abundó que éste dio inicio en el 2006 como una suma de voluntades, y hoy es una realidad para 107 jóvenes que se han visto beneficiados por el programa a lo largo de 10 años, a través del cual “han logrado transformar su vida y contribuido a su desarrollo personal y comunitario en sus lugares de origen”.

Laura Gabriela Aburto Lugo, Jefa del Departamento de Comunidades de Vida Universitaria de la UPAEP, comentó que cuarenta y siete jóvenes han egresado como profesionistas de distintas disciplinas académicas y ya se encuentran colaborando en proyectos en favor de sus comunidades, muchos de ellos a través de organizaciones de la sociedad civil que operan en el interior del estado como organizaciones de primer piso en temas de desarrollo rural, comercio justo, derechos humanos y  salud comunitaria entre otros.

Además de que los estudiantes que provienen de estas comunidades reciben un acompañamiento integral, para que su estancia en la Universidad no sea complicada en lo académico, social y económico.

Enfatizó que a 10 años, con mucho orgullo, se sigue volando alto para responder a las necesidades de convivencia y formación académica de estas nuevas generaciones; el programa sigue creciendo y en este aniversario se celebra con la construcción de un nuevo espacio, casa de nuestros becarios, que nos permita crecer en congruencia con el programa y su misión en las comunidades.

De igual forma, Aburto Lugo, subrayó que a través del programa de Una Apuesta de Futuro, se busca potencializar los talentos y brindarles una formación integral que después puedan explotar en sus comunidades y ayudar a otras personas de una manera solidaria.

Gabriela Aburto, reiteró que Una Apuesta de Futuro, nació como una iniciativa de desarrollo comunitario, y hoy incide a través de cuatro ejes en la calidad de vida de los estudiantes y sus familias: fortalece el liderazgo social y las capacidades locales de jóvenes que colaboran con organizaciones de la sociedad civil; ofrece acceso a educación superior reduciendo las barreras de la marginación educativa que existe en zonas rurales versus zonas urbanas del estado; promueve la movilidad social y la interculturalidad privilegiando el diálogo de saberes y la creación de corrientes de pensamiento.

Asimismo dijo que el modelo educativo, centrado en el estudiante considera el acompañamiento personalizado, actividades que desarrollan el liderazgo social de cada estudiante, espacios para el descubrimiento y la generación de talentos en el marco de una preparación académica de excelencia.

Por su parte, Gabriela Fernández Gutiérrez apuntó que en la actualidad se benefician 53 comunidades de 32 municipios del estado de Puebla; y nuestra décima generación se conforma con 12 estudiantes provenientes, la mayoría de ellos del norte del estado, y de dos comunidades colindantes con el estado de Veracruz quienes participaron en un minucioso proceso de selección de una convocatoria en la que intervinieron alrededor de 120 candidatos.

Esta generación está caracterizada por el perfil de ingreso de los estudiantes de Una Apuesta de Futuro, un alto sentido de pertenencia y compromiso social con su comunidad, que cada uno imprime su deseo de mejorar las condiciones de vida de sus comunidades a través de sus proyectos, seis de ellos orientarán su formación académica en las áreas de ciencias de la salud, cinco en disciplinas relacionadas con la interculturalidad y por último: uno a ciencias computacionales.

En su intervención, Yosuani Vargas Hernández, becaria de Una Apuesta de Futuro, generación 2010, destacó que el haber llegado a este programa, representó ser una de las mejores experiencias que ha experimentado en su vida, porque “en una comunidad rural, es muy difícil llegar a una universidad como la UPAEP y pienso que el esfuerzo continuo y la dedicación, me permitieron llegar a esta institución”.