El sueño de los aficionados al beisbol de contar con un diamante capitalino moderno y funcional está cada vez más cerca. La nueva casa de los Diablos Rojos del México, que se construye en la Ciudad Deportiva de la Magdalena Mixiuhca, presenta avances siginificativos que pueden confirmar que estaría listo para inaugurarse a mediados de este año, tal y como lo estipulaban los últimos planes. 

En un trabajo fotográfico  que realizó Excélsior vía aerea, se conocieron más detalles del inmueble y se aprecia que prácticamente el terreno de juego ya se encuentra  delimitado.

La zona de las tribunas también lucen con un avance considerable  así como la base del estadio, una de  las construcciones principales, en la que se instalará la techumbre, la cual será una estructura metálica que rompera con la figura tradicional de los estadios de beisbol.

La cubierta es angular, traslucida y muy dinámica, destinada a convertirse en una figura urbana memorable para la gran Ciudad de México.

En contraste con la ligereza de la cubierta, la base del estadio es topográfica prehispánica, conectada con la tierra, con el lugar, con su gente.

La obra, ubicada en la parte poniente de la pista del Autódromo de los Hermanos Rodríguez, fue anunciada el 2 de diciembre de 2014, con una inversión superior a los 60 millones de dólares.

El terreno ocupa 7.8 hectáreas de la Ciudad Deportiva Magdalena Mixiuhca. El 52 por ciento del predio lo ocupará el desplante del estadio y el campo de beisbol, mientras, la superficie restante se dejará libre para espacios abiertos como plazas y jardines.

Los accesos principales serán por Avenida Viaducto Río de la Piedad; el tránsito vehicular (entrada y salida) se hará por la Puerta 6 y el acceso peatonal se ubicará en la Puerta 7, la más cercana a la estación del Metro Puebla.

La nueva casa de los Diablos Rojos del México tendrá un aforo de  15,746 espectadores, los cuales  estarán divididos en cuatro secciones.

Además, el inmueble tiene la capacidad de contar con gradas temporales, con una capacidad de 5,728 asientos para alcanzar así un aforo total de 21,474 espectadores.

Durante la presentación del proyecto del nuevo estadio, también  se mencionaron otras características que presentará.

Como parte integral, el estadio promueve la ecología y la urbanidad a través de la creación de cuatro grandes espacios abiertos.

La gran plaza al norte del predio en la que se espera funcione como punto de acceso; el gran vestíbulo urbano en donde comienza el ingreso hacia el estadio; La plaza pública, localizada en la esquina sureste con carácter comercial y cultural, abierta durante todo el año; y los jardines al suroeste del terreno que estarán dedicados a preservar las especies naturales del lugar y la creación de un huerto urbano.

La fecha inicial para su inauguración era a principios de este 2017, pero debido a algunos contratiempos se informó que la nueva fecha  sería para finales de mayo o principios de  junio.

Los Diablos Rojos del México jugaron la mayor parte de su historia en el Parque del Seguro Social de 1955 al 2000.

Luego tuvieron al Foro Sol como casa, de la que tuvieron que salir ante la remodelación del Autódromo. Desde el 2015 juegan en el Fray Nano, estadio en el que iniciarán la  próxima temporada, mientras que concluyen los trabajos en el moderno diamante.

Partidos de Grandes Ligas, en la mira de la CDMX

El tener un partido de temporada regular de las Grandes Ligas en la Ciudad de México es el principal objetivo para aprovechar el nuevo estadio capitalino, como se informó desde el momento que se dio a conocer el proyecto en diciembre de 2014.

Luego de la visita que realizaron los Astros de Houston y Padres de San Diego para dos partidos de pretemporada en marzo de 2016, se comenzó a negociar la posibilidad de contar con encuentros oficiales y traerlos a la nueva casa de los Diablos Rojos del México.

Excélsior publicó en diciembre pasado una entrevista con Horacio de la Vega, titular del Instituto del Deporte de la Ciudad de México, en la que aseguró que los Dodgers de Los Ángeles era una de las opciones que se estaban contemplando debido a que es uno de los equipos de las Grandes Ligas con más seguidores en el país.

“Estamos seguros que el estadio estará a la altura para  recibir cualquier  evento, y de la mano con la fundación Harp Helú vamos a hacer lo posible por traer  partidos de temporada regular”, expresó en esa ocasión De la Vega ante la opción de traer partidos  a la Ciudad de México.

Alfredo Harp Helú, dueño de los Diablos Rojos del México, es también socio de los Padres de San Diego, por lo que este equipo sería una de las opciones para jugar en México y sobre todo al ser rival de los Dodgers en la División Oeste encajaría algún partido.

Padres y Dodgers tienen programadas varias series para la próxima temporada y en septiembre disputará dos.

La del 1 al 3 en el Petco Park de San Diego, luce como una opción real sobre todo si se toma en cuenta que el estadio estaría terminado y para entonces ya no habría temporada de la Liga Mexicana de Beisbol.