Ricardo Anaya y la plana mayor de Acción Nacional se tiró al suelo la tarde de este miércoles para exigirle al gobierno federal que rinda cuentas por el supuesto espionaje a defensores de derechos humanos, periodistas y ahora hasta políticos. Lo que el joven maravilla olvidó fue que el exgobernador Rafael Moreno Valle, también de extracción panista, utilizó la misma táctica para escuchar a quienes consideraba opositores e incluso a los propios blanquiazules. 

 

 

Así el llamado que realizó la víspera, Anaya Cortes durante una rueda de prensa para dar con los autores intelectuales, llevarlos ante la justicia y hasta encarcelarlos 12 años por el delito grave, resultó contrario a las practicas que aceptó y toleró, incluso cuando los espiados fueron militantes de su propio partido.

Iremos hasta las últimas consecuencias. No vamos a descansar hasta que los responsables renuncien a sus cargos, sean procesados y encarcelados. Y no nos referimos solo a los autores materiales, nos referimos a los funcionarios del más alto nivel que ordenaron la compra y uso ilegal de estos equipos y programas”, apuntó. 

Ricardo Anaya adelantó que solicitarán la intervención de instancias internacionales para que sean los expertos independientes quienes realicen la investigación a fondo, “toda vez que el gobierno no puede ser juez y parte”.

En la conferencia de prensa que se convocó de última hora, Anaya Cortes se hizo acompañar de integrantes del CEN, así como los coordinadores parlamentarios en la Cámara de Diputados y el Senado, Marko Cortés y Fernando Herrera y destacó que la presencia de todos era una muestra de la gravedad del tema.

Ahí mismo retomó la petición del diputado federal Jorge Ramos, integrante de la Comisión Bicameral de seguridad, para que comparezcan ante la Comisión Permanente los titulares de la Secretaría de Gobernación, del CISEN y de la Procuraduría General de la República (PGR). 

Dijo, el llamado es para que expliquen qué agencias gubernamentales adquirieron, directa o indirectamente, licencias de malware de vigilancia, cuántas licencias de infección se compraron, a quién se ha espiado y sobre todo que aclaren si se contó con la autorización de un Juez Federal.

Intentaron infectarnos, dijo 

En voz del líder nacional del PAN, fueron cuatro miembros del CEN a quienes se les intentó espiar a través del mismo mecanismo. El envío de un SMS intrigante que remitía a una liga y esta redireccionaba a los mismos servidores donde investigadores de R3D y Citizen Lab tienen ubicado el malware de Pegasus. 

El panista también aseguró que ni él ni Marko Cortés, Damián Zepeda o Fernando Rodríguez Doval, accedieron a dichos links por lo cual descartó que la infección o las acciones de espionaje se pudieran concretar. 

Ese dominio es exactamente el mismo dominio que ya RD3 y Citizen Lab identificaron como el dominio al que llevaban los mensajes de Carmen Aristegui, de Simón Barquera, de Emilio Aristegui, el hijo menor de edad de Carmen Aristegui, los cuatro mensajes de Carlos Loret de Mola, los dos que le llevaron a Juan Pardinas, los dos de Salvador Camarena, los dos de Rafael Cabrera, los de Alejandro Calvillo y los de Luis Encarnación”, dijo mientras sostenía láminas con las impresiones de pantalla de su celular. 

Moreno Valle espió panistas 

En junio de 2015, la empresa italiana Hacking Team -proveedora de software de vigilancia- fue hackeada y desde su propia cuenta de Twitter se divulgaron los emails y facturas entre la firma y el Gobierno del Estado de Puebla, entonces encabezado por Rafael Moreno Valle. 

Se supo entonces que entre las víctimas del espionaje morenovallista estuvieron activistas, periodistas, políticos y hasta panistas como: Margarita Zavala Gómez del Campo; Gustavo Madero Muñoz, entonces presidente del PAN, y Ricardo Anaya Cortés, quien aspiraba a la dirigencia.

Sin embargo, en esa ocasión no fue llamado a cuentas el exmandatario poblano pese al escándalo por espionaje que se causó en Puebla y la filtración de grabaciones que en días posteriores circularon por los medios de comunicación. 

A detalle 

A demás de los panistas, otros políticos que también fueron víctimas del espionaje telefónico de Rafael Moreno Valle fueron los priistas: Rosario Robles Berlanga, entonces titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y Alfredo del Mazo Maza, actualmente gobernador electo del Estado de México, reveló el 6 de junio de 2015, el periodista Fernando Maldonado.