El combate al huachicol o robo de combustible a ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Puebla comienza a rendir frutos con el hidrocarburo decomisado, aunque las tomas clandestinas descubiertas en lugar de disminuir, han aumentado. Así lo demuestra un análisis de Intolerancia Diario realizado con dos respuestas de acceso a la información de la paraestatal y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Según la radiografía, en los primeros cuatro meses de 2017, el promedio de tomas clandestinas descubiertas cada 30 días aumentó en comparación con el año pasado.

Mientras tanto, los decomisos de combustible robado se incrementaron hasta en un 1,000 por ciento en los primeros cinco meses de 2017, contra el mismo lapso de 2016.