La policía española ha relacionado tres camionetas de alquiler con el principal fugitivo de una célula extremista islámica que cometió dos ataques mortales con vehículos en Barcelona y una localidad turística cercana.

Las tres camionetas fueron arrendadas con la tarjeta de crédito de Younes Abouyaaquoub, el marroquí de 22 años sospechoso de embestir el jueves a los peatones en Las Ramblas de Barcelona, según dijo el domingo un agente de policía. En el ataque murieron 13 personas y unas 120 resultaron heridas.

Abouyaaquoub sigue prófugo y era objeto de una gran operación de búsqueda en el nordeste de España.

El agente de policía, que habló bajo condición de anonimato para comentar una investigación en marcha, dijo que una de las camionetas se había utilizado en el ataque en Barcelona. Otra se encontró en Vic, 70 kilómetros (44 millas) al norte de Barcelona en la carretera a Ripoll, donde vivían los principales sospechosos de la célula. El tercer vehículo se encontró en Ripoll.

Frenan marcha islamófoba en Barcelona

La policía cree que la célula quería llenar los vehículos con explosivos para cometer un gran ataque. Sin embargo, los planes cambiaron después de que la casa en Alcanar donde se preparaba el plan estallara el miércoles.

Papa pide alto a la violencia

El papa Francisco pidió el domingo el final de la “violencia inhumana” que ha golpeado a inocentes en Burkina Faso, España y Finlandia en los últimos días.

Francisco lideró a la multitud reunida en la Plaza de San Pedro en su plegaria del mediodía en memoria de las víctimas, y dijo que el mundo lleva en su corazón “el dolor de estos ataques terroristas”.

El pontífice pidió a Dios que “libere al mundo de esta violencia inhumana”.