Entre desconcierto y dolor, familiares, amigos, vecinos y voluntarios trabajan desde hace horas entre escombros de más de una treintena de casas, edificios, escuelas de México, derrumbados la tarde del martes tras el fuerte sismo de magnitud 7,1 en la escala de Richter que ha sacudido el centro del país.

Con la esperanza de poder sacar aún con vida a hombres, mujeres y niños, los voluntarios ayudan con cubetas, palas, picos, tubos, y lo que encuentran a su paso, a los soldados, bomberos, policías y otras autoridades que remueven pedazos de hormigón o ladrillos.

Continúan las labores de rescate 

Los paramédicos también siguen en los puntos más afectados y no descansan desde que ocurrió el fuerte movimiento telúrico con epicentro en Axochiapan, Morelos, registrado a las 13:14 hora local (18:14 GMT) del martes, de acuerdo con el Servicio Sismológico Nacional (SSN).

Donde más se trabaja es en la Escuela Enrique Rébsamen, ubicada en el sur de Ciudad de México, donde ya se han confirmado 25 muertos, mientras que 11 personas han sido rescatadas y30 siguen desaparecidas. Los padres de los menores no se mueven del lugar y siguen colaborando.

Sobre la avenida Gabriel Mancera, en la Colonia del Valle, en Ciudad de México, bomberos actuaron con rapidez y lograron sacar en camilla a dos personas con vida de uno de los edificios.

¿Cómo podemos ayudar?", era la frase de quienes llegaban al sitio, donde lo mismo había oficinistas de traje que mujeres en ropa deportiva transportando piedras hacia camiones de carga.

Una anciana rompió en llanto al ver las ruinas en las que quedó su urbanización.

¡Era todo mi patrimonio!", exclamó  mientras personas se arremolinaban a su alrededor para consolarla.

Diferentes locaciones se improvisaron como centros de acopio en el que se están donando palas, herramientas, diesel para la maquinaria que remueve los pedazos de hormigón.

Además, comienzan a llegar algunos alimentos como pan, agua y fruta para los voluntarios y equipos de rescate.

Hasta esta madrugada, según Protección Civil del Ministerio mexicano de Gobernación, al menos 217 personas murieron por el fuerte sismo que provocó que edificios de la Ciudad de México y de los estados centrales de Morelos y Puebla registraran colapsos parciales y daños.

También se ha dejado sentir el apoyo y solidaridad de los mexicanos en Jojutla, Morelos, dónde no se descansa y los voluntarios dicen que permanecerán en los lugares donde se buscan a personas con vida.

Morelos ha registrado 71 de las 217 muertes que el gobierno mexicano contaba hasta las primeras horas de hoy a consecuencia del temblor. El resto se reparten entre Ciudad de México (86), estado de Puebla (43), Estado de México (12), estado de Guerrero (4) y Oaxaca (1).

El presidente de México, Enrique Peña Nieto, presentó un informe de los daños materiales en el que reportó dañadas unas 48.000 casas, mientras que 45 edificios se derrumbaron, siendo las entidades de Morelos, Puebla y Ciudad de México las más afectadas.

El temblor en Morelos llega 12 días después del sismo de 8,2 grados que se cobró 98 vidas en los estados meridionales de Oaxaca y Chiapas, donde la emergencia todavía se mantiene.

También llegó en el mismo día que la Ciudad de México conmemora el 32 aniversario del devastador terremoto del 19 de septiembre de 1985 que acabó con la vida de más de 10.000 personas.

En el zócalo de Puebla se ha instalado un centro de acopio y se encuentran concentradas las ambulancias.

Muchas personas que han sido rescatadas de entre los escombros habían pedido ayuda a través de sus teléfonos móviles, y gracias a la tecnología las redes sociales activaron una función de localizador de personas.

En tanto, a través de las redes sociales y medios de comunicación, se solicita voluntariado para seguir con el rescate en diversos puntos de la capital mexicana pero también en los estados afectados.

A su vez, empresas de telefonía local y móvil han abierto la red de WiFi Móvil en apoyo a los damnificados, mientras que las autoridades trabajan arduamente hasta esta madrugada para restablecer servicios como la luz eléctrica.