Con la obra La desobediencia de Marte, llega el primer actor Joaquín Cosío, para presentarse en la Angelópolis acompañado de José María de Tavira, el sábado 14 de octubre en única función a las 20 horas, teniendo como sede el Auditorio del Complejo Cultural Universitario.
La puesta escrita por Juan Villoro, cuenta con la dirección de Antonio Castro, quien presenta durante 2 horas, la parte científica del texto, pero también la humana, ya que si bien la base del montaje son los descubrimientos de los personajes protagónicos, también la obra permite adentrar a ese manejo emocional que se da en las personas, al juego de tiempos y a la psicología que refleja el porqué de las situaciones.
La trama y sus personajes
Con la actuación estelar del primer actor Joaquín Cosío, quien está acompañado de José María de Tavira, el montaje trata del encuentro que 2 astrónomos tuvieron en 1599. Tycho Brahe quien tenía las mejores tablas de medición y Johannes Kepler era el mejor matemático del momento.
Ellos se necesitaban, pero desconfiaban el uno del otro. Tycho era un científico experimental, un aristócrata mundano que miraba los cielos y Kepler un científico teórico, un hipocondríaco con carencias económicas y mala vista. De esa mezcla de rivalidad y dependencia surgió la teoría que permitió descifrar las órbitas de los planetas.
La desobediencia de Marte, plantea así, el duelo que transformó la historia de la humanidad y luego pasa a la vida de esas personas, del conocimiento del prójimo, que es tan complejo como conocer las galaxias; lo mismo que el cuarto planeta del sistema solar, Marte, donde la guerra, brutalidad y más, forman parte de las emociones humanas, y que los dos astrónomos no están exentos al igual que todos las personas de tener confrontación algo natural de la convivencia y que en ocasiones desencadena cosas buenas como es este caso.
