El Gobierno español revisó a la baja la previsión de crecimiento de 2018 por la crisis política de Cataluña que hará empeorar las estimaciones de déficit  público y el crecimiento del PIB para 2018.

Todos los medios económicos y distintos expertos coincidieron hoy, sábado, que la inestabilidad política de Cataluña afecta al camino de la recuperación y alertaron de que esta región autonómica puede entrar en recesión que a su vez podría afectar al crecimiento del resto de España.

Mientras la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, anunció que el Ejecutivo ha puesto en cuestión sus previsiones de crecimiento económico para 2018, de una subida del PIB del 2,6 por ciento como consecuencia de la inestabilidad política en Cataluña, el ministro de Economía, Luis de Guindos, en su reunión semestral del FMI en Washington, reconoció el viernes que el borrador de las cuentas del próximo año recoge "una pequeña bajada" en la previsión del aumento del PIB para 2018, sin concretar detalles.

De esta forma, el Gobierno y los principales servicios de estudios están revisando sus estimaciones ante la situación en Cataluña, aunque "si sigue la tensión política probablemente cuando volvamos a hacer previsiones, tendremos que rebajar las del año que viene", señaló María Jesús Fernández, economista de la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas) que ahora augura un crecimiento del 2,7 por ciento para 2018.

El impacto de la crisis catalana en el consumo, la inversión, el turismo y el empleo puede afectar al conjunto de la economía española, según distintos analistas, que de acuerdo con todas las previsiones, España podría cerrar este año con un crecimiento superior al 3 por ciento por tercer año consecutivo, pero con la crisis de Cataluña esta predicción no se repetirá en 2018, donde el propio Ejecutivo prevé un crecimiento inferior al 2,5 por ciento ya anticipado por el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Por otra parte, los primeros datos oficiales confirman que en Cataluña hay una fuga de empresas desde que se celebró el referéndum ilegal del día 1 hasta el 11 de octubre, donde al menos  540 compañías han salido de Cataluña, según los datos provisionales del Colegio de Registradores y con una caída de la inversión del 10 por ciento.

En relación al tema de Cataluña, el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, ha dejado clara su oposición a que esta región española se independice y ha rechazado actuar de mediador entre Barcelona y Madrid porque España se opone a esa mediación y la Unión Europea (UE) solo media entre Estados.

Si permitimos, aunque no sea nuestro asunto, que Cataluña se independice, también lo harán otros después y eso no me gusta. No quiero una Unión Europea que dentro de 15 años esté formada por 98 países. Es relativamente difícil con 28, con 27 no es más fácil, pero con 98 sería imposible", destacó el presidente de la CE.