El mexicano Rubén Cárdenas Ramírez murió esta noche, exactamente a las 10:26 p.m. debido a una inyección letal en la prisión de Huntsville, Texas, como pena por haber secuestrado, violado y matado a su prima Mayra Laguna hace 20 años.

La ejecución de Cárdenas Ramírez tuvo lugar momentos después de que la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos negara el último recurso de apelación que presentó el Gobierno de México para evitar que Cárdenas Ramírez cumpliera su condena, según informó Robert Hurzt, vocero del Departamento de Justicia Criminal en Texas (TDCJ). 

El mexicano de 47 años de edad estaba recluido la Unidad Polunsky de Huntsville desde el 29 de julio de 1998 acusado de homicidio capital, por la muerte por golpes y asfixia de Laguna, de 16 años, el 17 de febrero de 1997, cuando falleció en la ciudad de Edinburg, en el condado de Hidalgo, en el sureste de Texas y la frontera con México.

Este es décimo mexicano ejecutado en Texas desde 1993. Uno más fue ejecutado en Virginia.

El Departamento de Justicia Criminal de Texas (TDCJ) anunció que Cárdenas Ramírez, originario de la ciudad mexicana de Irapuato, en el estado de Guanajuato, falleció por inyección letal.