El coordinador del Departamento de Ciencias Sociales de la Universidad Iberoamericana Puebla, Juan Luis Hernández Avendaño, resaltó que el Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción se ha distribuido a los partidos políticos y no a los ciudadanos, pues en la designación se careció de la fuerza para dejar de ver los perfiles “exgubernamentales, expartidistas, cuando el perfil debiera ser total y absolutamente ciudadano”, lamentó. 

Por lo tanto, puntualizó que da la impresión que estas nuevas instituciones, como el Sistema Estatal Anticorrupción, no terminan por ser aquellas que los ciudadanos merecen “en el sentido de que fueran realmente órganos que representaran las nuevas agendas que requiere el país de transparencia”.

Hernández denunció  las “nuevas instituciones pero con viejas prácticas, que siguen obstaculizando lo necesario, un Sistema Nacional Anticorrupción que fuera totalmente ciudadano. Hoy están dadas las condiciones para que eso sea lo que suceda” a mediano y a largo plazo.

Al finalizar la instalación del Consejo Consultivo en Nutrición Clínica y Ciencias de los Alimentos, explicó que los dirigentes de los partidos políticos y de la administración estatal en turno no logran comprender que su papel rector y su tiempo de control a ultranza de la sociedad ya pasó.

“Estamos en otro momento, en otro tiempo y siguen aferrados a controlar los órganos nuevos, autónomos del estado; todos estos órganos que nacieron con la idea de que fueran ciudadanos e independientes no han terminado por serlo, todo lo contrario”.

De este modo, recordó  el caso del Instituto Nacional Electoral, que cuando se le conocía como Instituto Federal Electoral fue concebido como un órgano ciudadano, pero la realidad indica que está totalmente “capturado” por las fuerzas electorales y autoridades de las altas esferas de la Federación y de los gobiernos estatales.

Juan Luis Hernández reiteró que esos órganos fueron generados para que los ciudadanos tuvieran un papel esencial en la vida interna de la política estatal y nacional pero desafortunadamente no es así.

Subrayó que las dirigencias de los partidos políticos tienen sus propios espacios pero al no estar conformes con el poder que ostentan, cierran más el espacio a la democracia al colonizar y al contaminar a esos espacios ciudadanos.

“Los partidos políticos no están conformes con que hayan espacios ciudadanos y los que hay, los están colonizando; como las candidaturas ciudadanas; tenemos esta suerte de partidocracia expandida y eso sí es malo”.

Caso Maciel

El rector de la Ibero Puebla, Fernando Fernández Font, al referirse al nuevo escándalo del sacerdote de los Legionarios de Cristo, Marcial Maciel, por estar involucrado en los Paradise Papers destacó que: ¿No debe regir la ética también en el fondo, en la manera de producir la riqueza?

Destacó que no es sólo una cuestión de los Legionarios, pues desgraciadamente, es mucho más amplio que ellos y siempre deja una pregunta, ¿a nivel económico se vale cualquier medida?, subrayó.

El verdadero problema, destacó, es que ese recurso sale del país sin pagar los impuestos que deben, pero van y pagan impuestos a estos paraísos fiscales; estas operaciones implican una pregunta ética muy profunda,  ¿se trata de sacar dinero por sacar dinero, al máximo precio, o se trata del bien del país o sólo el bien de unos cuántos?”, acentuó.

Fernando Fernández afirmó que se debe realizar un análisis muy profundo del caso y tener clara la legislación, porque a partir de un hecho no se pueden sacar reglas del bolsillo. Por lo tanto, pidió a las autoridades ser verdaderamente independientes y no dejarse sobornar porque los dos grandes problemas en la nación son la corrupción y la impunidad.

“Es el gran problema de México, detectamos los crímenes pero no hay justicia y ese binomio terrible: corrupción e impunidad, está destruyendo a la ciudadanía; si descubrimos el problema pues hay que actuar con la legalidad en la mano, ni más ni menos, pero no dejarse sobornar”.