El senador panista Javier Lozano no será expulsado ni sancionado pese a que anunció abiertamente que prefería apoyar las aspiraciones presidenciales de José Antonio Meade antes que las del líder nacional del blanquiazul, Ricardo Anaya, reconoció el dirigente municipal, Pablo Rodríguez Regordosa.

Desde que se conoció de la renuncia de Meade Kuribreña a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para registrarse como precandidato presidencial del PRI, el senador Javier Lozano aplaudió la decisión del exfuncionario federal y anunció que él y algunos panistas más, entre ellos los autodenominados Rebeldes, apoyarían el proyecto.

Como parte de sus muestras de apoyo, el exsecretario federal del Trabajo, apostilló en Twitter una imagen donde aparecen los dos muy sonrientes junto a la frase: “Muy buen día tengan ustedes apreciable comunidad. Que sea un #FelizMartes para todos. Tápense que hace frío ?? Bueno, salvo @JoseAMeadeK ????”.

Calificó como buena decisión del Partido Revolucionario Institucional, el elegir a quien fuese el secretario de Energía durante la administración de Felipe Calderón, pese a no ser un militante tricolor, porque dijo, así puede representar los intereses de la ciudadanía y no solo del partido.

Por la mañana de este miércoles, en diversas entrevistas radiofónicas y televisivas sostuvo su postura con frases como: “El candidato del PRI es formidable, es mejor que cualquiera de los que nos están poniendo en frente”. “Me veo apoyando a José Antonio Meade en la campaña porque lo conozco en lo personal, en lo familiar, porque sé de su capacidad de tomar decisiones”. Incluso: “Es fácil que quienes conocemos a Meade nos parezca más atractivo que el Frente”.

A la par, arremetió en contra del presidente nacional de su partido al señalar que la ambición del llamado joven maravilla es “la causa de esta ruptura al interior del PAN” y agregó: “Hoy estamos en las peores condiciones y tiene nombre. Me parece que si Ricardo Anaya es candidato del PAN o del Frente, es una candidatura fracasada desde ahora.  Si es el candidato puede darse por enterado desde ahora que no cuenta conmigo”.

El hombre que antes se decantó por el exgobernador Rafael Moreno Valle como el presidenciable, dejó abierta la posibilidad de que en caso de que el exmandatario obtenga la candidatura por el Frente Ciudadano por México, apoye a su partido.  

Voto útil por Meade

Para el panista, la pelea por la presidencia de la República en 2018 sólo se dará entre Andrés Manuel López Obrador, líder de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y José Antonio Meade Kuribreña, quien representará al Partido Revolucionario Institucional (PRI).

El senador dijo que a falta de una segunda vuelta, se verá el fenómeno del voto útil, una forma de castigar las decisiones de Anaya Cortés: “Donde muchos panistas que, aunque no simpaticen con el PRI, votarían por Meade”.

Cabe mencionar que Lozano Alarcón, junto con Jorge Luis Lavalle, Salvador Vega Casillas, Ernesto Cordero y Roberto Gil, entre otros, ha conformado un bloque en contra de Ricardo Anaya y se han autodenominado Los Rebeldes, lo que incluso ha generado memes.

Sin sanciones 

Pese a las declaraciones de Lozano Alarcón, el dirigente municipal del PAN, Pablo Rodríguez Regordosa, descartó que se tenga previsto algún proceso sancionador o de expulsión por mostrar su beneplácito y pronunciarse a favor de un candidato de otro partido.  

Rodríguez Regordosa incluso sostuvo que Lozano Alarcón no violó los estatutos porque Meade Kuribreña, aún no es candidato.

“No, Meade todavía no es candidato todavía, está el PRI en su proceso y el pronunciamiento de Lozano es entendible porque fueron compañeros de gabinete en el sexenio de Felipe Calderón y nadie en su sano juicio que haya colaborado con Meade puede dejar de reconocer que es un hombre capaz, talentoso y entregado a su función como servidor público y que en donde ha colaborado ha hecho un buen trabajo y eso se está refiriendo Lozano”, señaló.

La declaración contrasta con las acciones que tomó la dirigencia blanquiazul el año pasado cuando decidió iniciar procesos de sanción y expulsión contra 70 militantes que le dieron su firma de apoyo a la entonces aspirante a candidata independiente, Ana Teresa Aranda.