Al grito de “¡Ni una más!”, activistas encabezados por Paola Migoya exigieron la renuncia del fiscal General del Estado, Víctor Carrancá Bourget, al tiempo que clausuraron las oficinas de la entidad de gobierno de manera simbólica.

A unos minutos de que el fiscal compareció ante el Congreso del Estado, en las puertas de la Fiscalía General del Estado (FGE), se colocaron 110 cruces de cartón que representan a cada una de las mujeres asesinadas en Puebla entre 2017 y los primeros días de 2018.


Paola Migoya, líder de la Plataforma Unidos por Puebla, consideró necesaria la renuncia del fiscal Víctor Carrancá y que se active la alerta de género en Puebla.

Explicó que se venció el plazo de 48 horas que dieron a la FGE, para dar respuesta a los feminicidos que no han sido esclarecidos, por lo que Paola Migoya y un grupo de mujeres, colocaron las cruces blancas donde a gritos señalaron que “ni una más”.

La activista subrayó que, de acuerdo a las estadísticas del Secretariado Ejecutivo Nacional de Seguridad, a partir de 2012 a la fecha en Puebla se encuentran desaparecidas 781 mujeres en Puebla.

Además, sentenció que en la entidad no existe ninguna estrategia de búsqueda por parte de la Fiscalía para localizarlas, por lo que urge la alerta de género.

Señaló que la ola de violencia en Puebla cada día va en aumento e incluso que la organización Antorcha Campesina, a través de protestas y cierre de vialidades, lograron que los responsables del asesinato de Huitzilan de Serdán, Manuel Hernández Pasión, hayan sido detenidos, pero solo por presiones políticas trabajaron en la FGE.

Señaló que ya es necesario que en Puebla se active la alerta de género, porque es una exigencia no solo de las organizaciones, sino de las instituciones educativas, incluso de la propia Comisión Nacional de Derechos Humanos.

La protesta se registró en medio de rumores que el fiscal de Puebla Víctor Carrancá Bourget será relevado del cargo en los próximos días.

De este modo, arguyeron que Carrancá Bourget debe irse de Puebla debido a la nula respuesta para combatir los asesinatos contra mujeres en la entidad.

Además, señaló que durante su periodo de gestión, impuesta desde el sexenio de Rafael Moreno Valle Rosas, han desaparecido 781 mujeres en el estado.

Esta semana, el  Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) confirmó que el 2017 fue el año más violento en Puebla, tras documentar la ejecución de 2.5 homicidios dolosos al día.

De la cifra oficial de 919 homicidios registrados en el estado, 112 fueron contra mujeres, de los cuales 102 se tratarían de feminicidios, según documentaron observatorios ciudadanos y medios locales de comunicación.

Alguna víctimas

En los primeros 20 días de 2018 ya suman nueve casos de posibles feminicidios o mujeres asesinadas con violencia en Puebla, según datos hemerográficos.

Puebla está en el décimo lugar nacional por el número de “presuntas víctimas mujeres de homicidio doloso”. Entre las víctimas, destaca la niña Ameli, abusada sexualmente y después asfixiada en el municipio de Tulcingo del Valle.

Además se registró un doble feminicidio de dos trabajadoras domésticas en Tehuacán, una de ellas de nombre Luisa, quien se encontraba con ocho meses de embarazo.

La mujer fue asesinada con tres navajazos en el vientre, por lo que también murió el producto, mientras que Rocío, de 20 años, fue degollada, torturada y su cadáver encontrado semienterrado en terrenos de cultivo en el municipio de Palmar de Bravo.

El pasado fin de semana, dos mujeres más fueron asesinadas, con signos de violencia y tortura.

La primera el de una bailarina del Bar Noa Noa, ubicado en Puebla capital, y el segundo caso de una joven asfixiada y abandonada al interior de un vehículo en la colonia Lomas de San Miguel.

La mujer encontrada en el auto fue asfixiada con un suéter que le fue enredado al cuello, reportaron paramédicos del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA).

Mientras tanto, se dio a conocer el asesinato de la bailarina de nombre Violeta, quien fue ultimada de un disparo por arma de fuego en el ojo derecho.

La mujer contaba con 29 años de edad y dejó en el desamparo a dos menores de edad.