Desde julio pasado hasta la fecha, en Puebla se han presentado denuncias por fraudes ante la Fiscalía General del Estado (FGE). Empresas como Integra Servicios Financieros, Unicredit y Fondo Dinámico Integral han enganchado a sus clientes por medio de créditos. 

Los fraudes pueden llegar hasta 270 millones de pesos contra miles de personas, quienes llegan a ahorrar hasta medio millón de pesos, así lo expuso Gonzalo Castillo Pérez, director ejecutivo del bufete jurídico, Grupo Litigium.

El abogado detalló que dichas firmas ofrecen tramitar préstamos ante la banca comercial a tasas preferenciales, pero al inicio piden dinero a los interesados, principalmente a jubilados, pensionados y mujeres, a quienes les instan a dar un pago inicial de 10 mil pesos, y en algunos casos, superando el medio millón de pesos. 

El litigante abundó que la mayoría de los afectados busca recursos para solventar deudas, mismas que se acrecentan porque el préstamo nunca les llega.

“Han caído en las redes de estos defraudadores. No solo han perdido dinero, sino documentos con los cuales podrían robarles su identidad, tales como acta de nacimiento, CURP y comprobante de domicilio. Además de que las gestoras se quedan con sus tarjetas de crédito”, expuso Castillo Pérez.

Sin avance 

El director ejecutivo del Grupo Litigium, Gonzálo Castillo, sostuvo que el proceso para adquirir el préstamo depende de lo que se solicite, es decir, si se necesitan 800 mil pesos: “De entrada tenemos casos que la mayor parte ha presentado 40 mil pesos de cargos a tarjetas de crédito y así empiezan. Después ya empiezan a solicitar depósitos en efectivo, aumentando el fraude”, explicó.

El litigante dijo confiar que en un periodo no mayor a un año y medio se pueda resolver la situación de las víctimas, con la finalidad de que recuperen su dinero o la mayor parte, una vez que las autoridadaes den con los responsables de estas casas de préstamos.

Indicó que el despacho que representa ha interpuesto 37 denuncias por fraudes, cometidos de julio pasado a la fecha, ante la FGE, pero no hay avance en las investigaciones. En ese semestre, y a pesar de tener demandas en contra, las tres empresas mencionadas continúan operando en la capital del estado, con distintas direcciones.

“Cambian las direcciones de manera constante, las últimas dos se encontraban en la avenida Juárez y bulevar Atlixco, luego al tener demandas, cambian domicilios y teléfonos”, dijo.

En el caso de Fondo Dinámico Integral, relató el abogado, se tiene conocimiento que también tiene presencia en la Ciudad de México. Asimismo, refirió, dentro de la misma empresa hay una serie de trabajadores que se dedican a defraudar, abusando que nunca han tenido un crédito bancario los clientes.

Incluso, la firma tiene el caso de una persona que gastó 547 mil pesos para la supuesta gestión. Asimismo, afirmó en otros casos, que ha aumentado el fraude en venta de vehículos.

“Los ciudadanos observan coches con signo de pesos y al marcar llegan a un acuerdo para la compra. Durante la transacción, los defraudadores citan a su víctima en un banco, les piden cheque y lo depositan, pero al final este dinero nunca se ve reflejado”, puntualizó Gonzalo Castillo.

La dinámica

Prometen un crédito para pagar deudas

Solicitan una cuota para comenzar con el trámite

Aseguran que el dinero es para gestionar ante instituciones bancarias el crédito

Empiezan con 10 mil pesos, para la apertura o lo que se deje el cliente

Cobran además gastos para un seguro
 

“Han caído en las redes de estos defraudadores. No solo han perdido dinero, sino documentos con los cuales podrían robarles su identidad, tales como acta de nacimiento, CURP y comprobante de domicilio. Además de que las gestoras se quedan con sus tarjetas de crédito”

Gonzalo Castillo
Abogado

A considerar
El abogado Gonzalo Castillo dijo confiar que en un periodo no mayor a un año y medio se pueda solucionar la situación de las víctimas, con la finalidad de que puedan recuperar su dinero o la mayor parte, una vez que las autoridades den con los responsables de estas casas de préstamos.