Investigadores en física no descartan el riesgo de un nuevo fraude electoral realizado de manera cibernética, como ocurrió en los años 2006 y 2012, aunque por la diferencia que hay en las encuestas les costará más trabajo.

Al presentar el libro “Basta de Fraudes Electorales”, Jorge Alberto  López Gallardo, doctor en física y uno de los autores, acompañado del doctor en derecho, Germán Molina Carrillo, el investigador sostuvo que por “metiches” los científicos pudieron descubrir cómo si es posible que se cometa un fraude electoral en México.

Rechazó que sea un mito el fraude de 2006, cuando se dio una diferencia de 200 mil votos entre Felipe Calderón y Andrés Manuel López Obrador.

Dijo que en 2006 tanto el PREP como el cómputo final mostraron inconsistencias que no son propias de una elección, pues una vez estabilizado el comportamiento con el 70% de los cómputos, se esperaban variaciones menores (usando teoría de números) que al final resultaron ser hasta 25 veces superiores, revelando un comportamiento anormal cuando las curvas debieron cruzarse.

En la elección de 2012, también se dio el fraude tomando en cuenta distintas muestras, el comportamiento estimado no es coincidente con el que se supone que obtuvo la población, rompiendo diversas reglas de la estadística para ello.

Señaló que en la última elección presidencial el fraude se hizo comenzando por las encuestas y a falta de las agregadoras con las que se cuenta hoy en día, estas revelaban comportamientos muy desiguales en los que al realizar un análisis más profundo, resultaban de una manera completamente distinta a como se dieron las votaciones, beneficiando de sobremanera en su momento a Enrique Peña Nieto sin que se cumpliera incluso con modelos bayesianos.

Preparados para 2018

El investigador señaló que contemplando que continuarán prácticas similares en las presentes elecciones, que podrían cambiar en la forma pero no en el fondo, el científico miembro de la Sociedad Americana de Ciencias, señaló  que para evitar estas acciones es necesario que se dé el voto masivo  para que incluso metiendo mano en los sistemas, no puedan realizar el cruce para hacer ganar a alguno de los candidatos que van muy abajo en las encuestas.