El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, elogió hoy la expiración de una prohibición que impedía que los homosexuales sirvan abiertamente en las fuerzas armadas.

“Hoy, la discriminatoria ley denominada ‘No preguntes, no digas’ es final y formalmente revocada. A partir de hoy, los estadunidenses patriotas ya no tendrán que mentir sobre lo que son para servir al país que aman”, indicó en un comunicado.

Agregó que “las fuerzas armadas ya no perderán las habilidades extraordinarias y experiencia de combate de muchos militares gay y lesbianas”.

“Hoy, como su comandante en jefe, a los que fueron dados de baja bajo esta ley quiero decirles que su país valora profundamente su servicio”, enfatizó.

El mandatario explicó que en diciembre del año pasado promulgó “con orgullo” la revocación de la ley “No preguntes, no digas” porque sabía que mejoraría la seguridad nacional, aumentaría la disposición militar y llevaría los principios de igualdad y justicia para todos los estadunidenses.

Señaló que “los logros son un tributo a todos los patriotas que lucharon y marcharon por el cambio”, a los miembros del Congreso, a ambos partidos, a los que votaron por la revocación, así como los civiles y militares que aseguraron la transición a la nueva medida.

Asimismo, “al profesionalismo de nuestros hombres y mujeres en uniforme que nos mostraron que estaban listos para avanzar juntos hacia delante, como un equipo, para responder a las misiones que les pedimos”.

Obama sostuvo que los soldados, incluyendo a los gays y lesbianas, han dado su vida para defender la libertad y que ahora todos los estadunidenses se pueden enorgullecer de haber dado otro “gran paso” para mantener a las fuerzas militares como la mejor del mundo.

Por otro lado, la campaña de reelección de Obama envió un video en el que varios militares homosexuales y lesbianas relatan sus experiencias tras haber sido de baja debido a la política del Pentágono adoptada en 1993 y ahora expirada que los obligaba a ocultar su orientación sexual.