El consumo desmedido de bebidas embriagantes y problemas que se quedaron sin resolver provocaron que Tomás Zeferino Romero le disparara a quemarropa y en dos ocasiones a su padre Tomás Zeferino Bello, de 57 años de edad, quien murió en el lugar de los hechos, en la comunidad de Zacamolica de Olinalá Guerrero, en territorio poblano. El homicida escapó llevándose el arma homicida.

El agente del Ministerio Público de Chiautla de Tapia, informó del inicio de la Averiguación Previa 239/2011/CHIATLA DE TAPIA, iniciada por el delito de homicidio calificado, por lo que agentes de la Policía Ministerial del Estado (PME), recibieron ordenes de buscar y presentar al sospechoso del crimen, de quien se presume anda “a salto de mata”.

Las primeras investigaciones del crimen las proporcionó Graciela Antonio Guerrero López, madre del sospechoso y viuda del ahora occiso, quien dijo que padre e hijo durante varias horas del domingo estuvieron ingiriendo bebidas embriagantes y a la vez conversaban de problemas entre ambos.

Graciela escuchó que después su hijo y su esposo estaban discutiendo, luego sobrevino la detonación de un arma de fuego y cuando fue a ver que pasaba vio a su hijo que salía corriendo y a su marido que estaba tendido en el piso, donde a los pocos instantes murió.
El médico legista que se hizo cargo de la practica de la necropcia reportó que Tomás presentada dos heridas de arma de fuego, una en la región infraclavicular, al lado dfe la tetilla izquierda y la otra a la altura del hipocondrio, las causas de su muerte fueron por shock hipovolémico.